Cada país tiene su idiosincrasia y sus señas de identidad. Hemos leído que lo primero que hicieron los estadounidenses cuando se enteraron de que venía la COVID-19 fue ir corriendo a comprar armas. Así son ellos. Sí. Temían el desabastecimiento, el pillaje, los desórdenes públicos, el caos. Y la mejor forma de hacer frente a todo ese sindiós es comprarse un buen AK-47 o un M-16(1). Los miramos con superioridad y conmiseración. "Pobrecillos", nos decimos, "qué simplones son".
Pero qué bolos. Armas, armas, armas para todo. ¿Así creen que van a superar la pandemia? Qué manía, de verdad.
Nos quedamos tan panchos y tan satisfechos de no ser como ellos, de ser más sofisticados, más civilizados, más cultos.
¿Y qué es lo primero que hemos hecho los españoles? Pues muy fácil: Suprimir controles y trámites para dar licencias urbanísticas. Que ya digo que somos otra cosa.
Para empezar, la presidenta de la Comunidad de Madrid anuncia triunfante que sustituye las licencias urbanísticas por declaraciones responsables.
Eso significa que los proyectos y planes que hasta ahora eran examinados por los técnicos de la comunidad (y tardaban un montón, y encima ponían pegas) ahora no van a sufrir control alguno, y todo el procedimiento va a ser sustituido por que el interesado (incluso si es perpetrador de lofts "residen-dustriales") declare "responsablemente" que cumple con todo. Y ya está.
-¿Pero lo dice usted responsablemente?
-Responsabilísimamente.
-¿Es usted un ciudadano responsable?
-Por supuesto. No tiene usted más que ver cómo llevo la mascarilla en la nuca(2).
-Pues hala, hala. Empiece a arrasar.
Esto ocurre en la Comunidad de Madrid. Pero es que en la de Andalucía también van por el mismo camino: Quieren aprobar una nueva Ley del Suelo para eliminar burocracia.
Aún no se sabe cómo será esa ley. Pero... ¿una ley para eliminar burocracia? Para eliminar burocracia están las disposiciones prácticas de régimen interno, la contratación de más técnicos, la organización del trabajo, la aprobación de instrucciones y procedimientos menores... o tal vez incluso la modificación de algún artículo de algún reglamento, pero no la aprobación de una nueva ley.
Si la agilización de procesos requiere una nueva ley es que va a haber un montón de controles y de requisitos que ya no van a ser necesarios: ¿Alguien va a hacer una macrourbanización en suelo rústico? Venga ¿Y eso exigía un estudio arqueológico previo? Pues ya no. ¿Un estudio de flora y fauna? Pues ya no. ¿Un estudio de abastecimiento de agua? Pues ya no. ¿Y de su evacuación y depuración? Pues ya no. ¿Un estudio de tráfico? Pues ya no. ¿Y de...? ¡Que no!
-¿Y todo eso por qué?
-Por el coronavirus, coño, que está dejando la economía hecha unos zorros.
Hay que añadir que tanto la Comunidad de Madrid como la de Andalucía están gobernadas por la misma coalición de partidos de derecha. Y eso no es que tenga mucha importancia en sí mismo (o tal vez sí), pero es que unos de los principales dirigentes del partido que está más a la ultraderecha de esa coalición, que son cónyuges y socios, coleccionan un montón de sentencias condenatorias y denuncias y querellas de todo tipo por llevar ejerciendo durante bastantes años una actividad urbanística e inmobiliaria... llamémosle "de legalidad imaginativa". Y ciertamente esto puede ser la solución de todos sus problemas. Pero no son ellos solos. Hay un montón de "ciudadanos responsables" que están deseando que su "responsabilidad" sea el único filtro para obtener lo que quieren.
Otra cosa distinta, de la que también merecería la pena hablar, es de cómo se realizan actualmente los inacabables controles que requiere toda actividad urbanística. ¿Estamos de acuerdo en que son necesarios? Sí. ¿Admitimos que no se puede autorizar un polígono industrial sobre las ruinas de una ciudad romana? Por supuesto ¿Ni que se cargue una zona de cría del lince? Pues claro ¿O que no garantice la depuración de sus aguas residuales? Eso no hay ni que preguntarlo.
Pero es que cada una de esas autorizaciones o comprobaciones se llevan meses y meses en las consejerías correspondientes, después de los cuales nunca llega el ansiado informe favorable, sino un informe tipo con cuarenta deficiencias tipo (a veces son solo sospechas o posibilidades) que hay que solucionar o aclarar con más documentación. Para subsanar todo ello (a veces, hay que decirlo, meras pamplinas) le dan al administrado escasos días, en los que hace trabajar frenéticamente a sus técnicos (que han estado todos esos meses tocándose las narices, esperando el veredicto). Entrega toda la documentación de nuevo (refundida y completa, claro), y vuelve a esperar meses y más meses para que le den otra ristra de "deficiencias", que a menudo no tienen que ver con las de la primera lista. Esto es kafkiano. Y así en cada consejería o cada departamento o servicio.
Pero esto es otra historia. Lo que quería contar hoy es que no se puede agilizar un procedimiento tan exhaustivo, exigente y desesperante por el expeditivo método de suprimirlo sin más. Igual que no se puede corregir el feo vicio de comerse las uñas que tiene tu marido por el contundente método de matarlo. Vamos, poderse sí se puede. Pero no está bien.
Y, sobre todo, no se puede hacer todo esto echándole la culpa a la COVID-19, que cualquier excusa nos vale para tirar al monte. Que parecemos yankis, coño.
--------------------------------------
(1).- Eh, que yo de esto ni idea. He tenido que buscar rifles de asalto en google y lo primero es que no son rifles, sino fusiles.
(2).- Estos días estoy viendo mucha gente con la mascarilla en la garganta. Ayer vi a uno que la llevaba en la frente, como las gafas del Corbu o de Oiza: Parecía un unicornio a quien le hubieran cortado el cuerno y le hubieran puesto un apósito en la cicatriz. Pero hoy mi mujer me cuenta que ha visto un ciclista con la cabeza afeitada y la mascarilla en la nuca.