Cuando practicas senderismo, excursionismo o montañismo, estás expuesto al ataque de algunos de los seres peligrosos de la Península Ibérica, aunque más allá de lo que todos tenemos en mente gracias al imaginario popular, estos animales tienden más bien a pasar desapercibidos.
En el primer capítulo te hablaba de la peligrosidad de algunos dípteros e himenópteros (mosquitos comunes, mosquito tigre, abejas y avispas) y en esta segunda entrega vamos a subir un peldaño en el grado de peligrosidad.
Esta vez el ataque (o más bien la torpe defensa de su territorio) de un sólo individúo de las especies de las que te voy a hablar hoy, podría resultar mortal. En este punto, decir que nuestro amigo Miguel Esteban (Don Poli), ya estará moviéndose nervioso en su sillón pensando que por fin viene el oso, pero no, hoy tampoco será el día del plantígrado.
La segunda entrega tiene como protagonistas a aquellos arácnidos y miriápodos (arañas, escorpiones, garrapatas y escolopendras), que pueden hacer que tu jornada de senderismo se convierta en toda una pesadilla.
Con el fin de tranquilizarte, ya te anuncio que en toda la península no hay más de una decena de “malos bichos” que nos puedan dañar de gravedad, y de ellos, tan solo un par son letales si no se toman las medidas oportunas a tiempo.
IMPORTANTE: Es necesario añadir que para un alérgico las consecuencias de picaduras y mordeduras adquieren una dimensión de gravedad bien distinta, debiendo ir debidamente equipados a la montaña y con la medicación que el médico les haya prescrito para atajar un posible caso de intoxicación.
CAPÍTULO II (Artrópodos)
Arácnidos y Miriápodos.
Dentro de la gran familia de los artrópodos vamos a prestar atención a estos dos grupos, puesto que la picadura de determinados arácnidos y miriápodos puede acarrear muchos problemas.
1.- Ixodes ricinus, garrapata común.
Esta especie de ácaro es un parásito de los animales, posee dos uñas y una trompa que le permite perforar la piel del huésped y succionar su sangre (manteniéndola fresca gracias a una sustancia anticoagulante que posee su saliva).
El principal peligro de la picadura de la garrapata radica en su alta capacidad para transmitir enfermedades graves, entre las que destaca el Tifus, la enfermedad de Lyme o la fiebre hemorrágica Crimea-Congo.
Ixodes ricinus, garrapata común. Ilustración: Manil Raga.¿Cómo identificarla?
Machos y hembras presentan diferencias importantes; los machos miden unos 2,5 mm, las hembras pueden alcanzar los 4 mm, aunque tras alimentarse pueden llegar a los 10 mm. Los machos tienen el cuerpo cubierto por un caparazón, que en el caso de las hembras sólo cubre la parte anterior del cuerpo y haciendo de este modo posible que su parte posterior sea muy flexible.
¿Dónde las puedes encontrar?
En la naturaleza podemos encontrarlas en la vegetación, esperando un posible huésped al que aferrarse y succionarle la sangre. Las garrapatas son parásitos de animales domésticos, y obviamente también del ganado. Así que cuando detectemos rastros del paso del ganado por una zona (excrementos de cabra, por ejemplo), evitaremos entrar en contacto con los arbustos de la zona. Es muy común que los pastores utilicen masías abandonadas, corrales o abrigos para resguardar al ganado en la montaña, así que allí también puedes encontrarlas.
¿Cómo protegerte?
Con las garrapatas nuestra mejor baza es la prevención, evitando las zonas por las que haya pasado ganado, como siempre, procurando llevar el cuerpo cubierto (pantalón largo con los calcetines por fuera y camiseta de manga larga si vamos a caminar por una zona de paso de ganado). Si sospechamos que podemos llevar alguna encima nos detendremos para inspeccionar nuestra ropa y mochila antes de que nos puedan morder.
¿Qué pasa si te pica?
Las garrapatas, junto con un potente anticoagulante, también inoculan una sustancia anestésica que hará que no notes su mordisco. Por ese motivo, cada vez que vuelvas de la montaña (especialmente en primavera), es muy importante que además de inspeccionar la ropa y el equipo que has llevado, revises bien tu cuerpo, sobre todos las partes cubiertas de pelo o zonas como las ingles o las axilas. La picadura será siempre de un ejemplar joven, que son extremadamente pequeños y pueden pasar desapercibidos.
Excepcionalmente, algunos ejemplares son portadores de bacterias y virus: bacteria borrelia burgdorferi (enfermedad de Lyme), la borrelia hispánica (fiebre recurrente en España y norte de África), el protozoo Babesia spp (babebiosis), la Rickettsia connorii (fiebre botonosa) o la Francisella tularensis (tularemia).
Los síntomas que puede ocasionar la picadura de la garrapata dependen de la especie que te haya picado y de la enfermedad transmitida.
El enrojecimiento y una ligera inflamación de la piel en la zona de la picadura es lo habitual.
Pero debes estar atento a síntomas posteriores que evidenciarían la transmisión de alguna enfermedad: dolores articulares o musculares, rigidez de cuello, dolor de cabeza, debilidad, fiebre, inflamación de los ganglios linfáticos, dificultad (o parada respiratoria), ampollas, sarpullido o falta de coordinación de los movimientos.
¿Qué debo hacer nada más ser consciente de que te ha picado?
En este punto vamos a diferenciar dos formas de proceder diferentes.
Aunque pueden transmitir enfermedades graves, lo cierto es que no es lo común, por lo que ante todo, mantén la calma y extráela inmediatamente. Tienes que tener en cuenta que la garrapata cuando muerde entierra bajo la piel su cabeza, y que si ésta se desprende al retirarla y se queda en tu cuerpo podría causarte alguna infección.
Olvídate de los remedios locos, como aplastarla, usar alcohol o acercarle un cigarro encendido, todas esas cosas tan sólo agravarán las consecuencias de la picadura.
Si detectas que te ha picado dentro de las primeras 24 horas, tan sólo tendrás que retirarla con cuidado. Puedes quitártela usando unas pinzas (es conveniente que en tu botiquín lleves unas especiales para extraer garrapatas), situándolas lo más cerca posible de la cabeza, evitando que al presionar se rompa su cuerpo y tirar levemente hasta que la cabeza salga de la piel. Un último tirón hará que la garrapata termine de despegarse y salga en su totalidad. Luego deberás desinfectar la zona de la mordedura y pon un recordatorio en tu móvil de 30 días a partir de la fecha de la mordedura. Pasado ese plazo, si no te ha surgido ninguna complicación y nos has tenido ninguno de los síntomas que te he citado antes, ya puedes olvidarte de ella.
Si cuando descubres la garrapata ya han transcurrido más de 48 horas desde que sospechas que te picó, deberás acudir al centro de salud y que te la extraigan allí, indicándoles la fecha de la picadura y la zona geográfica en la que sospechas que te picó. Si te la quitas tu en casa, métela en un botecito y acude al centro de salud con ella. Por protocolo es posible que analicen la garrapata para ver si es portadora o no de alguna enfermedad, te administrarán antibiótico y te pondrán en observación.
2.- Latrodectus tredecimguttatus, viuda negra mediterránea.
Probablemente, junto a la tarántula (su hermana peluda), la viuda negra sea una de las arañas que todos tenemos en nuestra cabeza, pero lejos de transmitirte los poderes que convirtieron a Peter Parker en Spiderman, si la viuda negra te pica, lo que hará es inocularte su poderosa neurotoxina. Su nombre se debe a la fea costumbre que tiene de devorar a sus compañeros machos tras el apareamiento.
Latrodectus tredecimguttatus, viuda negra. Ilustración: Manil Raga.¿Cómo identificarla?
Diferenciarla del resto de las arañas es bastante sencillo, es de color negro y en su abdomen presenta 13 manchas rojas (tredecimguttatus significa 13). Las hembras miden de 8 a 15 mm y el macho de 3 a 5 mm.
¿Dónde la puedes encontrar?
Esta especie se encuentra a lo largo de las regiones mediterráneas, extendiéndose desde España hasta Grecia. Vive en zonas rurales, maleza y espacios abiertos con mucha hierva. En España son más frecuentes en la Comunidad Valenciana y Andalucía.
¿Cómo protegerte?
Las arañas en general, incluida la viuda negra, pican sólo para defenderse. Sabiendo esto, prevenir su picadura es bastante sencillo y pasa por que lleves cubierta la mayor parte de tu cuerpo. Usa camiseta de manga larga, sombrero, pantalón largo con los calcetines por fuera, bota de montaña y si has de apoyarte o mover algo con las manos, usa también guantes.
Si descubres una araña caminando sobre tu piel, no la aplastes, limítate a apartarla de ahí empujándola con el dedo.
¿Qué pasa si te pica?
Todas las arañas de las especies Latrodectus poseen un veneno que en dosis altas puede ser fatal para los humanos, aunque como esta araña hace lo posible para pasar desapercibida se producen muy pocas picaduras (y estas, además, salvo para personas de avanzada edad, no resultan mortales).
Inicialmente notarás un dolor agudo, localizado en la zona donde se ha producido la picadura y acompañado de molestias en esa zona (molestias que en muchos casos pasan desapercibidas). Después, suele presentarse un dolor de menor intensidad, acompañado del adormecimiento de la extremidad. La zona donde te ha picado presentará enrojecimiento (placas de eritema).
Una media hora más tarde, junto con los síntomas generales, puedes notar un aumento del dolor y contracciones musculares espontáneas. Como síntomas generales sudoración, salivación intensa, fiebre, inquietud, nauseas y vómitos, debilidad, dolor de cabeza y una intensa contractura de la musculatura abdominal y dorsal.
¿Qué debes hacer nada más ser consciente de que te ha picado?
Como con cualquier picadura, lo primero que tienes que hacer es limpiar la herida con agua y aplicarte frío en la zona. Si la picadura está localizada en una extremidad, también puede ser de ayuda elevar la zona de la herida.
En muy raras ocasiones la mordedura de la viuda negra resulta mortal, y habitualmente los síntomas ceden espontáneamente al cabo de unos días (7 como máximo), no obstante, sabiendo su evolución, lo más conveniente es que acudas al médico lo antes posible.
El antídoto se administra en caso de envenenamiento grave o moderado. Por lo general, los menores de 16 años, los mayores de 60 y aquellas personas que padezcan hipertensión arterial, enfermedad cardíaca o síntomas graves, son susceptibles de ser hospitalizados.
3.- Escorpius flavicandis, escorpión negro o de cola amarilla.
De las dos especies de escorpiones que habitan en la Comunidad Valenciana éste es el menos nocivo para el humano adulto, pero su picadura es altamente peligrosa para los niños.
Posee un aguijón dotado de un potente veneno en su último segmento corporal. Lo usa tanto para matar a los artrópodos de los que se alimenta como para defenderse de sus depredadores.
Escorpius flavicandis, escorpión negro o de cola amarilla. Ilustración: Manil Raga.¿Cómo identificarlo?
Puede medir hasta 45 mm, la coloración del cuerpo es negra, mientras que sus patas y la cola son amarillas. En extremo final de su cuerpo presenta un aguijón en forma de diamante, y en la parte delantera de su tronco podemos ver claramente dos poderosas extremidades en forma de pinzas (pedipalpos), con los que cavan cuevas, cazan e inmovilizan a sus presas.
¿Dónde lo puedes encontrar?
Éste escorpión tiene predilección por las zonas de frondosa vegetación, habitando también en los huecos de los muros de los edificios abandonados.
¿Cómo protegerte?
Evita meter las manos en oquedades de muros (como bancales, por ejemplo), mover piedras o manipular las raíces y las partes bajas de la vegetación, si por alguna de aquellas tienes que coger algo del suelo, asegúrate de que no hay ninguno a la vista.
Si la ruta por montaña tiene zonas en las que es necesario usar las manos para progresar, no lo dudes y ponte los guantes de senderismo.
Ni que decir tiene que por fascinante que te pueda resultar, lo mejor es que lo dejes en paz, sigas tu camino y dejes que el siga el suyo.
¿Qué pasa si te pica?:
La inoculación de su veneno produce una fuerte reacción local, con un dolor agudo en la zona de la picadura, inflamación y edema regional en el miembro afectado. De manera excepcional puede causar algún trastorno neurológico (agitación, inquietud, desorientación, obnubilación y convulsiones).
¿Qué debes hacer nada más ser consciente de que te ha picado?
Mantén la calma, es importante que no dispares tus pulsaciones, o acabarás acelerando el proceso de intoxicación al hacer que ese ritmo elevado de pulsaciones haga que tu torrente sanguíneo vaya más rápido.
Nada más picarte es importante que inmovilices la zona de la picadura para reducir la propagación del veneno y que apliques frío en la zona (la vasoconstricción que produce el frío retardará la absorción del veneno).
Además, es conveniente aplicar una banda constrictora que comprima sólo la circulación venosa superficial y que no afecte a la circulación profunda del miembro afectado. Esta banda sólo es útil si la aplicas con inmediatez, y deberás cambiarla de lugar cada quince minutos (de ese modo evitarás las lesiones que podrían venir derivadas de que por el exceso de presión el riego sanguíneo se viese interrumpido).
Tras los primeros auxilios, acude al médico inmediatamente (si puedes hacerlo), o contacta con el 112.
Y nunca, bajo ningún concepto se te ocurra tirar mano de la navaja para hacer una incisión, lo único que conseguirías sería agravar la situación (además, eso ya no queda bien ni en las películas).
4.- Buthus occitanus, escorpión amarillo o alacrán.
Se trata de la especie más peligrosa de escorpión que habita nuestros montes, aunque con alguna diferencia de hábitat y de costumbres, deberás adoptar las mismas precauciones que con el escorpión negro.
Buthus occitanus, escorpión amarillo o alacrán. Ilustración: Manil Raga.¿Cómo identificarlo?
Lo normal es que midan entre 4 y 6 cm, aunque en edad adulta podrán alcanzar los 10 cm. Su cuerpo es de color ocre, con la cola y las patas de color amarillo. En extremo final de su cuerpo presenta un aguijón en forma de diamante, y en la parte delantera de su tronco podemos ver claramente dos poderosas extremidades en forma de pinzas (pedipalpos), con los que cavan cuevas, cazan e inmovilizan a sus presas.
¿Dónde lo puedes encontrar?
Es más activo en los meses más calurosos, durante el día se oculta bajo las piedras, bajo la pinocha o la hojarasca o en grietas. Por la noche sale de caza, y se siente especialmente atraído por la luz, seguramente debido a la cantidad de insectos que siempre hay a su alrededor.
¿Cómo protegerte?
Para evitar problemas con los escorpiones es importante no manipular las piedras, y si te encuentras un escorpión, déjalo tranquilo para evitar que te ataque y te inyecte veneno con su aguijón, que es su manera de defenderse.
¿Qué pasa si te pica?
La inoculación de su veneno produce una fuerte reacción local, con un dolor agudo en la zona de la picadura, inflamación y edema regional en el miembro afectado. De manera excepcional puede causar algún trastorno neurológico (agitación, inquietud, desorientación, obnubilación y convulsiones).
¿Qué debes hacer nada más ser consciente de que te ha picado?
Mantén la calma, y adopta las mimas medidas de primeros auxilios que te he descrito para el escorpión negro.
5.- Scolopendra cingulata, ciempiés.
Este miriápodo es el más grande de Europa, ya que puede llegar a alcanzar los 20 cm de longitud (15 cm los que habitan en la Comunidad Valenciana).
Scolopendra cingulata, ciempiés. Ilustración: Manil Raga.¿Cómo identificarlo?
Vayamos a lo fácil, aunque no tiene cien pies, tiene muchos pares de patas, concretamente 21.
Es de color anaranjado y su cuerpo tiene apariencia segmentada. Los ciempiés son cazadores, y utilizan el veneno de sus forcípulas (dos pinzas puntiagudas conectadas a glándulas venenosas), para reducir a sus presas.
Una de sus ventajas anatómicas y que utiliza para despistar a sus predadores es el parecido que tiene entre la parte final de su cuerpo y la cabeza, por lo que te servirá también de ayuda a ti a la hora de identificarlo.
¿Dónde lo puedes encontrar?
Abunda en lugares oscuros, abrigados y pedregosos. Crea pequeñas madrigueras, formando túneles bajo las piedras firmemente asentadas en el terreno para hacer allí sus nidos. Es de hábitos nocturnos, cobijándose a lo largo del día bajo las piedras.
¿Cómo protegerte?
No levantes piedras con las manos desnudas y evita también coger al ciempiés, ya que es extremadamente rápido y escurridizo.
Uno de los lugares favoritos del ciempiés para refugiarse son las botas de montaña, así que atención y antes de calzarte, cuando estés de acampada, revisa bien su interior.
¿Qué pasa si te pica?
Tal y como te avanzaba, su picadura la realiza a través de las pinzas situadas en la parte final del cuerpo, provocando un gran dolor, enrojecimiento y edema en la zona donde inocula el veneno. En ocasiones puede provocar la aparición de pequeñas vesículas cutáneas, y excepcionalmente podría provocar síntomas generales similares a los que produciría la picadura de un escorpión.
¿Qué debo hacer nada más ser consciente de que me ha picado?:
Ante la picadura de una escolopendra se debe inmovilizar la zona afectada y aplicar compresas frías sobre la misma. Puedes utilizar alguna pomada que contenga corticoides y antihistamínicos, así como algún analgésico para calmar el dolor.
Si los síntomas persisten, sería necesario que acudieses al médico para que te administrase el tratamiento adecuado.
Como siempre, espero que este post te haya resultado interesante, y no dejes de leer los otros dos artículos que conforman la trilogía: “Pequeños y peligrosos I” y “Pequeños y peligrosos III”.
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Bibliografía y fuentes consultadas:
- Mordeduras y picaduras de animales. Francisco Barcones Minguela. Hospital Universitario Reina Sofía. Córdoba.
- Mordeduras y picaduras. J. L. Gómez Encinas y A. Curieses Asensio. Servicio de Urgencia 061. IMsalud. Madrid.
- Manual Merk. Robert A. Barish. MD. MBA, University of Illinoils y Thomas Arnold. MD, Professor and Chairman, Department of Emergency Medicine, LSU Health Sciences Center Shreveport
- Manual MSD. Thomas Arnold. MD, Professor and Chairman, Department of Emergency Medicine, LSU Health Sciences Center Shreveport
- Mayo Clinic. Atención al paciente e información sobre salud.
- Cinfasalud. Eduardo González, experto científico de Cinfa.
- Sanitas. Biblioteca online de salud y prevención..
- Dirección General de Protección Civil. Vademecum Remer.