Hay momentos en los que cualquier amante del senderismo y de las montañas se queda sin palabras, y hoy estoy dispuesto a reconocer que yo no soy ninguna excepción (pero sólo hoy, ojo, que mañana volveré a ser de verbo fácil).
Sucedió en la Semana Santa de 2016, haciendo una travesía por la Sierra de Espadán (Castellón). Acabábamos de dejar el Barranco del Cañar y llegar a las inmediaciones de La Rápita (que con sus 1.106 m. de altura es la mayor elevación de toda la Sierra de Espadán), cuando extasiado, miré hacia el horizonte y señalando hacia el sureste dije: “Impresionante el skyline de la Sierra de Espadán.”
Sí, así fue, justo como te imaginas. Mis palabras sirvieron de regocijo y descojono para mis compañeros habituales (todos ellos y ellas un poquito cabroncetes, dicho de paso).
No sé si fue por hacer uso de esa palabra o por mi pronunciación del inglés (eso tendrás que preguntárselo a Pilar el día que coincidas con ella en la montaña), pero sin piedad empezaron con las mofas. Palabras y acentos aparte, ¿cómo llamas tu a esa línea montañosa que araña el cielo?
Aunque la llames como la llames, esas montañas recortadas en el horizonte seguro que también te dejan sin palabras.
En esos momentos, lo normal es entrecerrar los ojos, y una a una, intentar adivinar cuál es cual, descubrir qué pueblo es aquel que en la distancia se ve en lo más profundo de un valle o recordar aquella gloriosa ascensión al pico más alto que vemos en el horizonte.
Es entonces, cuando más ensimismado estás, que el más nuevo se te acerca y te pregunta: “Aquel pico de allí, ¿cuál es?”.
Y tu, que eres todo un experto, miras la silueta de la montaña, su posición y la forma de su pico, esforzándote por ponerle nombre a una montaña que nunca has visto desde tan lejos o desde ese ángulo. Tragas saliva, y sin abrir mucho la boca y algo avergonzado porque debías saberlo, dices aquello de : “no estoy seguro, pero creo…“
Por suerte, y gracias a la tecnología, hoy podrás decir: “Dame un segundo y lo averiguaremos“. Para ello tan sólo tendrás que tener a mano tu smartphone e instalarte alguna de las aplicaciones de realidad aumentada diseñadas para ese fin.
Cimas de España
Esta aplicación, hecha por un montañero y para montañeros, tiene muy claro que en el monte no siempre hay cobertura, por lo que no necesita de ella para poder funcionar.
Podéis seguir la evolución de esta APP y sus novedades a través de su muro de Facebook.
WorldSummits
Esta claro que es una aplicación muy montañera, y por eso no necesita conexión a internet para su funcionamiento.
La aplicación es gratuita, y esta disponible para terminales Android, aunque si quieres disfrutar de la opción que te permite localizar refugios y vivacs no te quedará otra que hacerte premium y pagar.
Layar (+ Puntos Geodésicos)
Después ya podrás mirar al horizonte a través de la cámara de tu móvil para ver en la pantalla todos los datos de las montañas que tienes enfrente (nombre, altitud, distancia a la que nos encontramos).
Obviamente a este visor le puedes añadir tantas capas como consideres útiles para ti, por lo que seguro que encuentras alguna otra que te resulta útil.
Particularmente encuentro esta aplicación la menos cómoda de usar, pero tiene una legión de fieles seguidores que sus motivos tendrán.
PeakFinder
El manejo de la aplicación web es muy sencillo, sólo tienes que introducir el nombre de la población o el pico desde el que te quieres asomar virtualmente (también puedes hacer la aproximación a la zona y elegir la localización utilizando su mapa), e instantáneamente verás una ilustración con trazados a lápiz de las montañas y los accidentes geográficos más destacados, perfectamente referenciados con sus topónimos.
Señala con el puntero cualquiera de esos topónimos y haz “clic” sobre él, podrás ver a qué distancia y en qué dirección se encuentra de la posición que ocupas virtualmente, y si cliqueas sobre el pequeño icono del caminante, te desplazarás hasta el objetivo señalado y podrás ver el panorama desde esa nueva posición.
Además de la versión de escritorio, puedes descargarte la APP e instalarla en tu móvil (es gratuita y está disponible para Iphone y Android). Si quieres saber más sobre esta herramienta, te recomiendo una visita al blog de Nikolai: Magazine Altura.
Si ya me has leído antes, sabrás que me gusta acabar los artículos como los empiezo, así que no me despediré sin poner una foto de aquella famosa salida de primavera que me servía para introducir este arículo, eso sí, con su correspondiente imagen análoga generada con PeakFinder.
Así seguro que entiendes porqué me quedé sin palabras aquel día de primavera del 2016, y de paso, dejaré que sea la misma Pilar la que descubra cómo se llama cada pico (¿o debería decir peak para continuar practicando mi inglés?).
Espero que este artículo te haya resultado interesante y la próxima vez que vayas a la montaña recuerda atarte bien las botas y no olvidar tu botiquín personal.
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