La luz de su sonrisa ilumina mis días.
Su voz es la melodía de mi existencia.
Sus dulces armónicos calman mi alma.
Su presencia es mi paz.
Complemento perfecto de mi universo.
Motor de cada uno de mis versos.
Hechizado por el misterio de su mirada.
Preso de su influjo.
Ella es capaz de sacar lo mejor de mí.
Ella provoca el brillo de mi mirada.
Ella provoca la más dulce de sonrisas.
Su voz es la calma de mí ser.
Mis dedos navegan presos de su piel.
El mar de sus caderas me ata al placer sublime.
La pasión lleva su nombre.
Su geografía es mi paraíso.
Tu poder me lleva al éxtasis.
Ella es el sendero del amor.