Hoy, quizás más que nunca hay que recurrir al sentido común.
En estos días de campaña electoral de las próximas elecciones europeas que se celebrarán el 25 de mayo, tenemos que parar un momento nuestros relojes y volver a releer y visionar las frases y gestos que sobre todo los principales protagonistas de los dos grandes partidos nos están arrojando sus 'tú más' sin proponer nada nuevo que nos haga recapacitar y poder ir a votar con ilusión.
Es de sentido común que los partidos políticos nos ofrecieran sus programas, propuestas con sentido común y sobre todo factibles y bien fundamentadas dichas propuestas. Se necesitan programas creíbles. Parece que es una perogrullada, y quizás lo sea, no lo dudo, con pocos puntos en los programas, seguro seguro que son más creíbles y por lo tanto muy probablemente sean más votados.
Pero si se empeñan en echarse en cara hechos y épocas anteriores (herencias recibidas), y no tienen la habilidad de ofrecer cosas con posibilidad de conseguir en la realidad, no en el terreno de lo probable, poco habrá que rascar.
Sentido común ¿es tan difícil actuar con sentido común? Dejemos de banalizar las actuaciones políticas a sabiendas que determinadas propuestas son totalmente inalcanzables.
¿Por qué se empeñan en prometer cosas que son imposibles de cuantificar a priori?
Es lo que yo llamo las cifras virtuales ¿En qué se basan las predicciones que hacen sobre creación de empleo?
'Cuando yo gobierne, acabaré con el paro, se creará empleo' Más o menos es lo que decía Rajoy en su campaña de las elecciones generales del 20 noviembre 2011.
Ahora vuelven a prometer otra cifra. Otra cifra virtual, no puede ser de otra manera.
Hay que tener sentido común y ofrecer, por ejemplo, cambiar la estructura actual, para conseguir empleo que sea creíble, pues los recortes en salarios y facilidades de despido, se está constatando que son una quimera para crear de verdad empleo.
Por favor si quieren votos, presenten programas creíbles con sentido común.