Mi pareja perfecta será probablemente francés, también, probablemente, me traerá croissants todas las mañanas a la cama, y puede, y digo puede porque no estoy seguro, que me lleve todos los domingos bajo La Torre Eiffel a jurarme amor eterno.Nada comparado con aquellas estupidas novelas romanticas, mi historia será diferente, siempre lo ha sido, y siempre lo será desde aquel momento en el que me habló en el supermecado,me ofreció pasar delante pues él supuestamente estaba visualizando chicles, o quizá solo visualizando la forma de hablar conmigo, sencuencia la cual no se si he sacado de alguna pelicula, digo 'no se' porque no estoy seguro.
Esta agonía que guardaba dentro cuando cerraba la caja con todos nuestros recuerdos :''Être au septième ciel ''.
ESTAR EN EL SEPTIMO CIELO
No parecia dificil dejarlo cuando todo iba mal, cuando el huracan habia pasado por nuestras sabanas y ya no quedaban pastas para nuestro petit dejeuner, ni tampoco ganas de continuar con la rutina en el mismo lugar de siempre y quizá a la misma hora.Por eso y solo por eso, y de esto si que firmemente estoy seguro, que guardé mis sentimientos en una manta y nuestros momentos en una caja justo en el torax de nuestros cuerpos.
''Los años enseñan muchas cosas que los días jamás llegan a conocer.''- Emerson -
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Fotografias : Gonzalo Sevilla