Ser chivatos a costa de nuestra seguridad

Quieren convertirnos en chivatos a costa de nuestra seguridad

Ser chivatos

está de moda

No es la primera vez que expongo mi opinión sobre lo que llamo “la cultura del chivatazo”, y es que convertirnos en chivatos es algo que, poco a poco, nos están inculcando en nuestra sociedad, donde nadie conoce a nadie, pero todos vigilan (y denuncian) a todos.

Nos están reconduciendo por un camino que puede ser muy peligroso y quieren convertirnos en chivatos militantes de una campaña de vigilancia y desconfianza en todos los ámbitos de la sociedad. No sé cuando empezó todo esto, pero hay muchos ejemplos de lo que digo, donde los medios de comunicación nos animan al chivatazo, a la denuncia, anónima o no, a costa, a veces, de nuestra propia seguridad.

Ejemplos: Denunciar al fumador o establecimiento donde pueda haber alguien fumando, denunciar al que tira una colilla por la ventanilla, denunciar a quien se empadrona en un domicilio distinto al suyo para que sus hijos tengan acceso a un colegio mejor, denunciar la supuesta violencia de género en casa ajena aunque no tengamos pruebas de ello, y lo último que yo recuerdo ahora: denunciar los destrozos del mobiliario urbano aportando grabaciones de video.

Bien, estamos en plena era tecnológica donde muchos ciudadanos llevamos una cámara de video en el bolsillo gracias a los nuevos teléfonos que cada vez permiten hacer más cosas. Grabar el video, en principio no es complicado y puede ser hasta divertido, pero lo que nos proponen es que pongamos en peligro nuestra seguridad a costa de hacer de funcionarios públicos sin sueldo ni derechos, y que estemos atentos en todo momento a lo que los demás hagan a nuestro alrededor. Nos incitan a convertirnos en chivatos grabando en video, normalmente sin zoom incorporado, escenas violentas para denunciar al que está quemando una papelera o un coche de policía, y nos dan un correo electrónico donde enviar el video para hacerlo de manera anónima: antivandalismo@policia.es

Lo que yo me pregunto es ¿cuánto de anónimo tiene el hecho de que yo me ponga a grabar en video a cuatro (o cuatrocientos) gamberros que no tienen reparos en quemar un coche o unos contenedores? El riesgo de cualquier ciudadano de ponerse a grabar un video violento es evidente, pero quieren remover nuestras conciencias, hacernos responsables en cierto modo a nosotros de lo que esos gamberros o delincuentes hagan, y también responsables de su ineficacia en mantener la seguridad ciudadana.

Señores, para eso están los policías, las cámaras de seguridad y todo lo que la estructura del Gobierno pueda dar de sí, pero querer utilizar a los ciudadanos para estas cosas, con desprecio a su seguridad, personalmente no me parece nada bien.

No voy a ser yo quien me ponga a grabar a un descerebrado a costa de mi seguridad.

Ramón Cerdá

Escrito por Ramón Cerdá en El Blog de Ramon. Si no estás leyendo esto en El Blog de Ramon, el artículo original lo encontrarás aquí …http://elblogderamon.com/ser-chivatos-esta-de-moda/.

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