Revista Salud y Bienestar
¿Qué es ser familia?
La mayoría de las personas tenemos o hemos tenido una familia en nuestras vidas. Sin embargo, hay otros que se encuentran solos y sienten la necesidad de apoyo y compañerismo que solo una familia puede ofrecer.Cuando Dios creó al mundo también creó a la familia al constituir a Adán y Eva como la primera pareja de nuestro planeta.Una familia es más que un grupo de personas que viven juntas y transitan por los mismos espacios. Tradicionalmente la familia ha sido definida por lazos sanguíneos que, aunque son muy importantes no limitan el vínculo que podemos tener con otras personas significativas para nuestras vidas.Por lo tanto, una familia es un grupo de dos o más personas que están unidas por vínculos afectivos y que se apoyan mutuamente, preocupándose unos por otro y procurando cubrir las necesidades individuales y colectivas.La familia básica o nuclear está formada por una pareja y por sus hijos si los tienen, pero también hay muchos otros tipos de familias. Por ejemplo, un padre o madre soltero con sus hijos, un abuelo o abuela que cría a sus nietos, hermanos adultos que conviven juntos, tíos que adoptan a sobrinos, etc. La familia extendida incluye a otras personas significativas con las que ya no se convive, pero con las que se mantiene el afecto y el interés mutuo. Pueden ser padres, abuelos, tíos, primos, etc.Lo importante es que en cada una de estas relaciones se cumplan las funciones fundamentales de la familia, las cuales son de cuidado, apoyo, protección y brindar un lugar o un espacio donde cada uno de sus miembros se puedan sentir seguros.Este es el ideal y posiblemente conozcamos o hayamos experimentado situaciones en las que la familia no cumple con estos roles y por el contrario se vuelve un lugar de tensión y mala comunicación.Al tener mayor intimidad y confianza podemos terminar traspasando los límites de la buena educación y de la amabilidad, llegando incluso a maltratarnos y hacernos daños.La buena noticia es que se puede tomar conciencia de los errores y comenzar a hacer cambios para mejorar la relación con nuestras familias. No intentando forzar o presionar a los otros para que cambien sino iniciando cambios a nivel personal que redundarán en una mejor dinámica familiar.Si te gustaría que tu familia se convierta en el sitio acogedor y protegido que Dios ideó para cada ser humano, mantén la esperanza porque siempre se puede mejorar las relaciones y con fe y constancia se puede alcanzar los propósitos celestiales.