Japón es el peor lugar del mundo para ciertos tipos de personas, pero también es el mejor lugar de este planeta para muchos otros más. Y ser asiduo a la lectura es una de ellas.
Desde librerias book off en las que puedes comprar libros apartir de 105Y hasta un barrio entero dedicado a los libros viejos en Tokyo como es Jinbocho, pasando por librerías que ocupan tres, cuatro, cinco, seis y siete pisos (como si fuera un corte inglés literario).
Una vez, alguien dijo
If you only read the books that everyone else is reading, you can only think what everyone else is thinking.
Si solamente lees los libros que todos leen, solamente podrás pensar lo mismo que todos piensan.
Por lo que para pensar diferente que el resto (cosa no muy difícil en mi) decídí buscar librerías apartadas de la mano aceitosa de turistas. Y una de ellas fue la tienda doble que está en el cuarto piso del Nakano Broadway.
Tienen una sección dedicada a los Ovnis, a la Magia y teorías paranoico-conspiranoicas. Otra a libros de sci-fi de hace un par de décadas y otro lugar para libros que ya nadie compra.
Pero lo mejor de todo, es una estantería al lado de la caja en la que venden libros de fotografía a 500Y y 1000Y que merecen la pena. Sobre las viejas y finas maderas en mi habitación que forman algo que alguien llamaria estanteria descansan ya tres tomos del maestro Araki.
Porque leer es un placer. Hay algunos que creen que no lo necesitan, aunque sea un libro con muchas fotos, como lo que buscábamos cuando eramos pequeños. Poca y grandes letras.
En la foto de arriba podemos ver a los cinco tipos diferentes de lectores. Las dependientas que leen por profesión/obligación. La señora que parece haber encontrado una moneda de oro pero que dejará el libro abandonado al terminarlo. El señor de la perilla que ama leer, y nada más en la vida. El chico que mira sorprendido a la cámara y escogió la lectura como otro club universitario a escojer, y los chicos del fondo, que estan empezando con esto.