El maestro de artes marciales Matt Fiddes, quien fue el encargado de proporcionar la protección al fallecido ídolo del pop en Reino Unido, se ha dirigido a Estados Unidos para presentar el caso en los juzgados, donde exigirá el derecho de poder ver al pequeño Blanket, de 10 años.
Fiddes ha asegurado haberle dado al artista, quien también tuvo otros dos hijos, Prince Michael de 15 años y Paris de 14; una donación de esperma en un hotel de Londres un año antes del nacimiento de Blanket en 2002.
“Voy a presentar mi ADN y a solicitar formalmente a los Jackson el acceso. Quiero los derechos de visita. Michael es su padre y no quiero cambiar eso, pero quiero a mi hijo en mi vida. La única manera de que eso sea posible es a través de la vía legal. Creo que Blanket es mío pero quiero la prueba definitiva”, declaró.
El guardaespaldas, que se ha comprometido a proporcionar a los funcionarios una prueba de ADN que pueda confirmar que él es el padre biológico del menor, alega que la familia del icónico artista se ha negado a hablar con él o a contestar sus cartas desde la muerte de Michael en 2009.
Fiddes, que tiene otros tres hijos, asegura que la estrella llegó a decirle que él era el verdadero padre de Blanket en noviembre de 2002, después del incidente en el que sacó al bebé de nueve meses para enseñarlo a sus fans por el balcón de un hotel.
“Me senté y se lo pregunté: ‘¿Es Blanket mi hijo?’. Él dijo: ‘Es mi hijo, Matt, pero usé tu esperma para concebirlo”, declaró.
Sin embargo, Fiddes afirma que la madre de Jackson, Katherine, ha hecho todo lo posible para bloquear su petición de ver al niño creyendo que solo buscaba su dinero.
Jackson murió de intoxicación aguda de Propofol en junio de 2009 a los 50 años.
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