Llegué hasta la pareja de autores suecos a través de las opiniones de unas, por mí muy admiradas, grandes lectoras de Novela Negra cuales son Marina Córdoba, Laky, Manuela, Rosa Berros, Marian, Natàlia, Ayla, Irunesa, Mari Ángeles y tantos otros amigos entusiastas devoradores de las, hasta ahora publicadas en España, cuatro novelas de la Serie Bergman. Todos ellos y ellas, algunos citados antes -y enlazados si se pincha sobre su propio nombre- y otros no encontrados ahora mismo en mi flojita memoria, me han animado a tomar en mis manos la primera aventura del peculiar Sebastian Bergman. La he leído en tres días y he quedado muy satisfecho, dispuesto a proseguir en cuanto pueda con las otras de su Serie.
Los autoresMichael Hjorth, nació en Visby, Suecia en 1963. Es productor de cine y televisión y guionista entre otras de la version sueca de "Wallander", creada a partir del personaje literario creado por el escritor sueco Henning Mankell, o de "Los crímenes de Fjällbacka", serie dramática policial sueca de 2012 adaptación de las novelas de Camilla Läckberg..
Hans Rosenfeldt, cuyo nombre original es Hans Petersson, nació en Borås, Västra Götalands län, Suecia en 1964. Es guionista y creador de una de las series escandinavas de más éxito: "Bron" ("El puente"). También es coguionista de la británica"Marcella".Serie Bergman 1A falta de leer otras novelas de la Serie, "Secretos imperfectos", a través de una trama policíaca de investigación de unos crímenes sucedidos en Västeräs, pequeña localidad sueca situada a 100 kilómetros de Estocolmo, nos presenta una serie de personajes que por las reseñas que he leído de las siguientes entregas de esta serie son fijos. Aparecen el jefe Torkel Höglund y sus líos amorosos con la perfeccionista Úrsula, el eficaz investigador y experto informático Billy Rosén, la joven Vanja Lithner y, naturalmente, Sebastian Bergman, el cincuentón de vuelta ya de tantas cosas que arrastra sus traumas familiares y que quizás por edad es irreverente, contestón, impertinente y un sinfín de cosas más que, pese a todo, le hace triunfar con el otro sexo.
A este núcleo de personajes lógicamente cabe añadir los nombres de otros secundarios pero que, imagino, tendrán en las siguientes entregas alguna participación. Me refiero a Mikael, el marido de Ursula; a los padres de Vanja; e incluso -sigo imaginando- a Lily y Sabine, mujer e hija de Sebastián, cuyo recuerdo le impide llevar una vida normal. De que estos que acabo de citar tendrán papel relevante en las siguientes entregas casi casi me jugaría el cuello. No haría lo mismo con los miembros del cuerpo de policía de la pequeña localidad, Västeräs, a la que se han desplazado los super stars de la Unidad de Homicidios de Estocolmo, y eso que la relación entre dos de ellos: Hanser, la jefa de la comisaría encargada de la resolución del crimen, y Haraldsson, el policía ninguneado por todos incluida su esposa Jenny, le sirve a la autores de soporte de la ración de humor que han esparcido por este relato.Del asunto policial en sí que se dirime en esta novela y para la que es requerida la presencia de este cuerpo especialista en resolver complicados homicidios sólo diré para no destripar la historia que estamos ante la muerte de un joven de 16 años que se educaba en un colegio de élite. Quién es este joven, cuáles eran sus relaciones familiares y de amistad dentro y fuera del Instituto de Bachillerato al que asistía, será lo que estos cinco investigadores habrán de analizar para así encontrar al culpable.
Como sucede en una novela negra que se precie la investigación sirve a los autores para pasar revista a la sociedad: el bullying escolar, el elitismo educativo y sus cloacas, el consumismo desaforado en nuestras sociedades, las difíciles relaciones de pareja, el sexo, el amor, el alcoholismo, el chantaje afectivo, las dificiles relaciones entre la prensa casi siempre sensacionalista y los investigadores policiales, las luchas dentro de las comisarías por ascender dentro del Cuerpo...
El modo de narrarSi, aparte de la personalidad del protagonista -aquí Sebastian Bergman-, algo hay que diferencie y haga destacar una novela negra de entre la inmensa floración de las mismas que actualmente existe, ello es la manera de relatar.
- Me ha llamado especialmente la atención cómo el ritmo endiablado que tiene la narración de vez en cuando los autores lo embridan y retienen mediante la inclusión de frases (a veces sólo palabras) que se suceden tras pausas largas (puntos y aparte) creando una sensación de conclusión lógica y definitiva:
"Vanja guardó silencio mientras seguía conduciendo. Había algo.
En Sebastián.
Algo que no había notado antes." (pág. 195)
"Estaba leyendo el Aftonbladet. Torkel también lo había hojeado. Lena Eriksson acaparaba cuatro páginas completas.
Bien escritas.
Reveladoras." (pág. 195)
- Este recurso lo utilizan con frecuencia para presentar acciones descriptivas:
"Sus colegas no habían notado nada porque Vanja era demasiado disciplinada pero el esfuerzo la había desgastado
Pensamientos
Preocupaciones" (pág. 180)
- Un ritmo que se marca especialmente al final de algunos capítulos o secuencias en forma de resumen de lo sucedido hasta el momento y en muy poco tiempo:
"Echó a andar hacia la puerta de la casa de sus padres. en menos de cuarenta y ocho horas había conseguido una casa, un posible hijo, un empleo, una potencial invasora y una probable enemiga. Reconoció que se había equivocado. No era verdad que nunca pasarabnada en Västeräs." (pág. 229)
- También me ha gustado la manera como en capítulos y/o secuencias consecutivas los escritores juegan colocando personajes diferentes que sin embargo comparten personalidades semejantes. Con este juego dan ritmo y viveza a la narración.
- Asimismo el uso del soliloquio, del pensamiento interior, presentado en forma de breves monólogos interiores juega una importante función en esta novela. Especialmente es en los interrogatorios donde la diferencia entre lo que se dice y se piensa, y entre lo que se escucha y se entiende donde estos monólogos destacan especialmente:
"'Eso no es verdad -le dijo la vocecita interior que la había acompañado todo el día-. Tú tuviste poder'" (pág. 106)
- Interesantísimo y un elemento importante para caracterizar a Sebastian Bergman es lo puntilloso que el psicólogo investigador es con todo lo referido a aspectos lingüísticos:
"Sebastián se puso a considerar si debía de explicarle a Clara que el uso de la segunda persona para hablar de sí misma, en lugar de la primera, era un mecanismo de protección verbal,una manera de generalizar su desgracia, de volverla menos personal, de eludir posibles responsabilidades." (pág. 100)
"-No eres el hijo de los Bergman? ¿Sebastián? ¿Trabajas en estas cosas, no? -Trabajaba. Pretérito imperfecto. Ya no." (pág. 82)FinalUna novela negra que se lee con ganas; una novela de personajes bien delineados con los que se empatiza positiva o negativamente dada su extrema verosimilitud (en el caso del protagonista me hace gracia la antipatía que genera en algunas de mis admiradas reseñadoras, citadas al inicio de este post, su fría relación con las mujeres); una novela que baraja con maestría los ingredientes clásicos de la novela negra: mundo urbano, cosmopolitismo, bajos fondos, adicciones [sexo, y alcohol], importancia del ingrediente psicológico, suspense, juego con el lector, giros inesperados de la trama, y, sobre todo, un final sorprendente que nos deja sedientos de iniciar la lectura de la siguiente entrega. Sí, está claro, se nota que Michael Hjorth y Hans Rosenfeldt son guionistas de exitosas series policiales para televisión.
