Revista Espiritualidad
SERVIR POR LA LEY DEL AMOR Cuando el alma ya nos guía, se amplía más y más nuestra capacidad de servir, de ayudar a los semejantes. Vemos dentro de cada ser la esencia espiritual. Sabemos que todos venimos de la misma fuente creadora y que el amor es la primera Ley del sistema solar. Así, tratamos a todos naturalmente con amor, inclusive a los que presentan características diferentes de la mayoría ó alguna limitación. Por la Ley del Amor, todo ser tiene su lugar en el universo, en donde puede desarrollar mejor sus aptitudes, su forma de donarse. Pero nadie es capaz de reconocer ese lugar usando únicamente la mente ò el deseo de servir. Sólo en lo profundo de nuestro ser sabemos dónde está. Para que lleguemos a este conocimiento y nos volvamos más útiles, debemos enfocar los niveles internos de la consciencia con fidelidad, constancia y desapego. De esos niveles emana la sabiduría necesaria para que ayudemos al prójimo sin interferir en su destino. Lo fundamental es que esta búsqueda interna sea la prioridad en nuestra vida. A partir de ahí, nuestros días se van convirtiendo en puro servicio del alma, en beneficio de cualquier persona que necesite ayuda. Fuente: Oportunidades de Crecimiento, de Trigueirinho