Dos manos
dos piernas,
orejas y ojos.
La dualidad es ilusion,
cosidos a nuestra voluntad
vuelan nuestros sentidos.
Aunque el sexo sea una habitacion vacia,
ahi mismo fluyes
fuera de ti.
Respiras, gritas, jadeas,
ries, lloras y vuelves a empezar.
Los abrazos del otro
piden lo mismo,
en el espejo devuelves
todo lo que pide
menos tu corazon.
En el camino de vuelta
algo dejo de ser funcional.
Ya no con la billetera
ni con la necesidad,
estreno un nuevo corazon
y me atrevo a amar.