Libres de toda sospecha, numerosos “artistas” salieron en defensa de su presidente. Era popular entre algunos sectores de las SGAE por su capacidad recaudatoria, lo que generaba pingüe beneficio para algunos. Incluso se atrevieron a poner en tela de juicio el juicio de lo jueces. Otros, la mayoría, no se beneficiaban de tan magnífica generosidad, y han permanecido en silencio, sobre todo porque los lobbys mediáticos de nuestro país no les dan voz.
Sin embargo, a medida que se va destapando la trama y aparecen nuevos datos vemos cuál es el arte de algunos de los más acérrimos defensores del señor Bautista ¿Con qué dignidad volverán a subir a un escenario? ¿Tendrán la desfachatez de llamar pirata a una persona que se ha descargado un disco cuando ellos ha robado millones de euros? ¿Actuará el sistema judicial con la misma contundencia con la que juzgaron a las empresas denunciadas por estos personajes?alfonsovazquez.comciberantropólogo