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Shadows of the Damned

Publicado el 12 julio 2011 por Mugen

Lo empecé sin demasiadas esperanzas ya que no me tenía demasiada buena pinta “¿Un resident evil 4 gamberro? ¡pues ya ves!” Pero claro, es que un Resident Evil 4 gamberro es algo magnífico!

Jugando a… Shadows of the Damned

 

Dos colgaos muy fumaos

 

 

AVISO: Análisis libre de destripes de las bromas épicas que Mikami y Suda se marcan. Lee sin miedo.

 

Y “magnífico” es una palabra que ahora no paro de repetir. García fucking Hotspur, haciédole un guiño a lo lugareños poseídos de cierto pueblo al sur de Europa, lo hace cada vez que consigue un logro tal como hacerle un upgrade a su arma demoníaca o reventarle la cabeza con un head shot a un demonio; y es que de guiños y carisma va este juego de acción en tercera persona.

No hace mucho Duke llegó a las tiendas, el juego es una puta mierda pero se apelaba a su carácter gamberro para salvarlo de la quema. Se decía que era divertido y que repetía muchas veces “tetas y culos”, lo que combinado con una jugabilidad clásica ( que no puede ser clásica cuando ni hay botiquines ni armas con límite de munición; sí, una gatling es un arma) se supone que ok, go. Curiosamente, Shinji Mikami y (me la) Suda 51 decidieron algo parecido “¿Y si hacemos un juego gamberrete de tetas, disparos, demonios, risas y tiros con una jugabilidad que me he inventado yo ya hace unos añitos y lo petamos?” Bueno, pues a ellos les ha salido de puta madre. Obviando los problemas del primero en cuanto a su desarrollo, si sólo pensamos en dos juegos cuya promo ha girado siempre en lo que a diversión pura, canalla y dura se refiere, Shadows of the Damned sienta cátedra; y eso que si analizamos en frío la producción, uno se da cuenta que este título es la suma de los desperdicios de varios juegos de los creativos.

_Dos locos y un amiguete
Sí, Mikami pone los zombies y el residentevilcuatrolismo; sí, Suda pone un humor maravilloso y una de las parejas más carismáticas de la historia de los videojuegos (el prota unido a su arma-demonio lo molan todo) pero es el amiguete del que menos se habla el que hace que el juego sea un pepinazo: ese Yamoka al sonido. Partiendo de una premisa sencilla en la que a un cazademonios le roban a la chica y para recuperarla tiene que bajar a los infierno, la combinación de aciertos en el diseño y en una madurez narrativa que se burla de los clichés de videojuegos, incluso usándolos, adquiere un poderoso acento gracias a las composiciones musicales del maestro; y todo combina a la perfección: la fórmula resident evil 4 sigue funcionando (aunque ahora nos podemos mover mientras disparamos) con jugabilidades propias que buscan siempre variar el ritmo del juego; porque el título es lineal, pero lo usa a su favor para hacernos correr a veces, otras enfrentarnos a oleadas de bichos, momentos más pausados… y todo muy, muy bien argumentado, sin cambios bruscos o aditivos inútiles; aquí os contaría cómo y también podría descubriros la combinación de humor+música+acción pero os toca a vosotros descubrirlo, porqué merece la pena, porque ver cómo dos coquetes te presentan un tópico para luego reirse de él, hay que descubrirlo; y me toca las narices estropear las sorpresas cuando éstas merecen la pena.

Jugando a… Shadows of the Damned

 

Las sorpresas de este juego son para el jugador como para Homer la tarta de cerveza

 

_Un tapado en toda regla
SOTD cumple como tapado: coñas geniales, una propuesta divertídisima con toques de genialidad en lo que a narrativa, presentación, diseños y ritmo se refiere pero, como buen tapado, cuenta con un puñado de taras para que pueda ser puesto a parir en los foros: para empezar, el desarrollo de resident evil 4 es demasiado parecido y las comparacione son odiosas; por eso RE4 es un obra maestra y éste un tapado. SOTD a veces parece un RE4 capado, en lugar de una evoluciónde éste, cosa que aprovecha Suda 51 para introducir sus chistes retro (que no os engañen por ahí, los chistes de Suda 51 molan mucho, siendo capaz de hacer elegantes chistes de pollas). Los bosses finales son desiguales: algunos muy divertidos mezclados con otros que se nos quedan mirando para que les peguemos (cosa que no soporto) y sobretodo, que se acaba pronto, sin llegar a las diez horas y luego para un cajón.

Pero pese a estos molestos lastres, el juego te tendrá siempre maravillado porque su propuesta es muy sólida, un título que funciona como un ideario de tres figuras del mundillo para que el jugador disfrute; lo consigue y, luego, a otra cosa.
Jugando a… Shadows of the Damned

P.D.::Me estoy dando cuenta que, cuanto más me gusta el juego que “analizo”, menos intento hablar de él para no estropearle a nadie las coñas que tiene, ni siquiera las que suceden al principio ¡¡No soporto la manía que tienen algunos de joder cosas que pasan en los primeros quince minutos!!

 


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