Revista Belleza

Si este verano necesitas desconectar de verdad, el Surya Namaskar será tu mejor aliado

Por Termalistas @Termalistas
Yoga


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El equipo de expertos del Fitness Center de Barceló Illetas Albatros revela cinco consejos para que este verano la relajación llegue a tu vida.
Salir de la rutina y cambiar de aires en verano se convierte en necesidad de primer orden y en una de nuestras prioridades. Necesitamos un respiro que nos haga alejarnos por unos días de las preocupaciones diarias y del trabajo, y que nos permita disfrutar de tiempo de ocio. Pero eso no significa que debamos dejar de cuidarnos o de hacer ejercicio ¡el yoga puede viajar con nosotros allá donde vayamos!
El verano no es excusa para dejar de hacer deporte. Las vacaciones son una oportunidad perfecta para construir buenos hábitos de salud y llevarlos después a la vida diaria. Al tener más tiempo podemos practicar deportes de mar o montaña, y explorar otras disciplinas, como por ejemplo el yoga. Este deporte, en verano, también puede cambiar de escenario contigo y trasladarse de la ciudad al mar. Desde el hotel Barceló Illetas Albatros, el equipo de expertos de su Fitness Center revela cinco consejos para que este verano la relajación y la tonificación lleguen a tu vida a través de esta disciplina:
Busca un lugar tranquilo y silencioso al aire libre o en interior: En el yoga es fundamental concentrarse en la respiración, y no dejarse llevar por los pensamientos, de ahí que sea fundamental buscar un lugar que te transmita paz. Para practicarlo puedes poner una música que te guste, relajada, suave… o puedes tan solo escuchar y conectar con los sonidos de la naturaleza. En el hotel Barceló Illetas Albatros los huéspedes pueden disfrutar a primera hora de la mañana de clases de yoga en el puntal, un pequeño acantilado en el mar que se convierte en el lugar idílico para relajarse, respirar y meditar.
Practícalo a primera hora de la mañana o última hora de la tarde. El yoga aporta multitud de beneficios tanto por la mañana como por la tarde, pero de una forma diferente según el momento del día. Desde el hotel Barcelo Illetas Albatros aconsejan practicarlo por la mañana para empezar el día con energía y con una actitud más abierta, e incluso practicar el Surya Namaskar, o lo que es lo mismo, el Saludo al Sol, antes del amanecer. Sin embargo, quienes prefieran pueden practicarlo por la tarde, siendo ideal para dejar atrás el estrés y la tensión, tanto física como mental, que se ha ido generando durante todo el día, y contribuyendo a tener un descanso más profundo y reparador.
Desconecta tu móvil durante unas horas: Dejar de lado o no la tecnología durante los días libres es una opción completamente personal, pero para hacer yoga es imprescindible ya que se necesita una atención plena al momento presente. La mente también necesita vacaciones, así que aprovecha la práctica de esta disciplina para regalarle el descanso que se merece.
Practícalo descalzo y siente ese arraigo a la tierra. Aunque no te gusten tus pies, o te dé cosa pisar la esterilla, intentar hacer yoga con calcetines te hará pasarte la clase patinando y te impedirá adoptar la técnica correcta en cada asana. Practicarlo descalzo te proporcionará mucha más seguridad, estabilidad y agarre. Los pies son la mayor base de apoyo, y descalzarte te hará sentir liberado, conectar con la Tierra, cargarte de energía, y ser sensible a las texturas de la naturaleza.
Termina tu práctica guardando unos segundos de silencio: La mejor forma de terminar la práctica de yoga es adoptando la postura Savásana, es decir, tumbarnos boca arriba, con las palmas de la mano mirando al cielo y soltar todo el cuerpo. Esta postura es una de las herramientas más poderosas para conseguir relajación, serenidad y armonía. La postura en sí es una forma de relajación consciente, esto quiere decir que se deben sentir todas las partes de cuerpo y relajarlas poco a poco. El equipo de expertos del Fitness Center del hotel Barceló Illetas Albatros recomienda mantener esta postura 15 minutos, para que el cuerpo vuelva a los niveles basales normales y el prana (energía vital) se asiente en nosotros después de la clase.


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