Porque el ahora es lo único que tienes.
Es posible que alguna vez, o muchas veces, hayas deseado algo con todas tus fuerzas y de tal forma que hayas vivido esperando que eso pase, pensando que hasta que no ocurriera no serías feliz y por lo tanto tu vida se ha convertido en una espera y no en un vivir pleno. Y tal vez cuando conseguiste lo que deseabas, te quedaste un poco desconcertado, porque pese a haberlo conseguido, seguías sin ser feliz. Te faltaba algo más o lo que habías conseguido no cumplía tus expectativas.Si eres un insatisfecho permanente tal vez debas empezar a aceptar lo que eres y lo que tienes y a buscar la felicidad en un sitio distinto. La felicidad no consiste en vivir una vida exenta de incomodidades y dificultades. La felicidad no es un cuaderno de ortografía sin ninguna falta. No es un dibujo perfecto, no es un cuadro totalmente derecho, no es armonía y perfecta simetría. La felicidad es la adaptación a lo que nos acontece en la vida, es la madurez para afrontar lo que nos suceda. Es disfrutar del momento presente sin desear nada distinto porque sabemos que todo lo que nos ocurre es parte de nuestro viaje. Un viaje hacia el conocimiento profundo de nosotros mismos.Tal vez te des cuenta de que tu vida ha estado errada, y que has estado buscando lo que no podía llenarte. Este pensamiento no debe torturarte, sino que debes alegrarte de haberlo descubierto a tiempo. Siempre hay tiempo para vivir plenamente y para aprender de nuestros errores La vida es lo que es y no lo que nuestra cabeza imagina o desea. Si dejamos de imaginar como debería ser nuestra vida y empezamos a vivir, descubriremos la verdadera felicidad.