Tal parece mi pequeño es fanático de la frase "Si no puedes comprarlo hazlo tú mismo".
Les digo esto porque no es la primera vez que no puede obtener todo lo que quiere, en especial juguetes, y decide el mismo construirlos. De hecho los juguetes que él mismo construye son muy preciados y especiales para él, aunque haya invertido solo un poco de cartón, papel y pegamento. Para él son como sus obras de arte, las cuida y guarda durante una pequeña temporada. Obviamente luego pasan al olvido, se aburre de ellos y adiós.Estoy segura de que eso pasará con su última creación. La famosa ardilla de la "era de hielo" que justamente ahora no recuerdo su nombre, lo cierto es que a mi hijo le encanta. Se ha visto todas las películas y es fans de ella. Así que mientras caminabamos a casa el día de ayer vimos en una tienda un peluche de la ardilla, el cual no lo compré por estar demasiado caro. Menos mal mi hijo lo entiende y jamás me ha hecho berrinche por un juguete que no puede obtener.
Ya estando en casa mientras tomaba el té con unas amigas que me llegaron a visitar notaba que mi hijo andaba como que muy ocupado en un asunto. Andaba buscando cartón y finalmente lo encontró. Al rato pasaba con tijeras y pegamento y pues de ahí todo era silencio y cuando esta así muy calladito, es que anda con las manos ocupadas en algo de hecho muy creativo.
Me acerqué al rato a ver que hacía y menos mal que el desorden en la sala no estaba tan desastroso como lo imaginaba. Lo veia cortando cartón de diferentes formas y cuando parece que ya necesitaba ayuda para unir ciertas partes llegó mi esposo del trabajo como caido del cielo, listo para ayudar con ciertos detalles que mi hijo no podía conseguir.
¿Qué había pasado?. Pues como no pude comprarle el juguete aquel a mi hijo, el no se hizo problemas, dijo lo hago yo mismo y lo hizo!.
Miren ahora que linda ardilla hecha de cartón que mi hijo con su creatividad logro hacer. Su papá le ayudo a unir las piezas pero basicamente la idea es de él.
Cuando me la enseñó me dejo con la boca abierta, no precisamente porque sea perfecta aunque de hecho quedo linda, sino por la lección que me deja.
Me enseña a no quedarse solo con las ganas cuando uno de verás desea algo, que con un poco de trabajo y de imaginación podemos lograr todo lo que queremos. La creatividad de mi querido hijo es asombrosa. Realmente prefiero que me dejé desordenada la casa a cortar esa imaginación tan grande que tiene. Como ustedes saben la imaginación es algo natural en los niños y frustrar una inclinación natural siempre pone en peligro el desarrollo normal de ellos. Por el contrario, cuando los padres apoyamos la expresión de la propia personalidad mediante fomentar su creatividad le confirmamos su valía personal y claro su autoestima crece mucho más. Hoy me pregunto que si que hubiera pasado si le compraba el juguete a mi hijo, seguro que me perdía de ver ésta maravillosa forma de expresar su creatividad y de reforzar su autoestima. ¡Mi hijo es único! y mientras juega con esta ardilla de cartón me da tiempo a mi para ir un día de estos al centro comercial a comprarle la ardilla de peluche. :)