Si no te gusta lo que eres, cámbialo

No tengo cosas nuevas que decir, tal vez tengo cosas que recordar. Esas cosas de sentido común, de ese sentido que hoy en día evitamos tener para no toparnos de golpe con la cruda realidad.
La vida es una mierda. Así te levantas cada mañana, pensando que la vida es una auténtica mierda. Muy bien, tienes mucho adelantado. Ya te has dado cuenta. Tus padres te educaron mal, en el colegio no te enseñaron nada, en la facultad te engañaron haciéndote creer que por tener un título serías alguien, cuando acabaste te volvieron a engañar porque necesitabas un posgrado y mientras tanto, tu vecino el que se escapaba en el instituto a fumar y comer pipas, conduce un audi a5, a6, o un a22 (qué sabremos nosotros) y se pavonea de sus vacaciones al sur de Pernambuco. Tolai, que eres un tolai. Sí, todo el mundo es responsable de la vida que tienes. Correcto, no tienes ningún poder de decisión en tu vida. Marioneta, tolai.
Deja de quejarte y haz algo con tu vida. Te lo digo en serio. De qué te sirve buscar trabajo fotocopia en mano todo el día, preguntando “¿Cómo dice que se llama la web a la que tengo que mandar el CV?” “Como la empresa, se llama como la empresa, TOLAI”.
Deja de quejarte por ese trabajo que no te gusta. Deja de quejarte por las facturas. Deja de quejarte por tu peso. Deja de quejarte del tiempo que hace. Deja de quejarte de tu familia. Deja de quejarte porque haga sol. Deja de quejarte porque llueva. Deja de quejarte porque te pese el culo. ¡Deja de quejarte!
Si no te gusta lo que hay, cámbialo. Niégate a creer que no tienes nada que hacer, eso es lo que te han hecho creer, que no puedes. Suelta lastres y manda a pastar a quien te impida avanzar por el camino que tu elijas.
Si no te gusta lo que eres, cámbialo.