Si no te has enamorado, nunca creerás en el amor eterno

Zhang Yimou director de "La casa de las dagas voladoras" o, "La maldición de la flor dorada", se centra en una historia real, basada en la época de la Revolución Cultural de Mao Tse Tung, con la intervención de los actores Zhou Dongyou, y Dou Shawn. Dentro de una emotiva y bonita historia de amor, que se antojaba prohibido entre dos jóvenes dentro de los tiempos de Mao Tse Tung. La película a sido expuesta en varios festivales de cine, donde llego a ser nominada como mejor actriz y mejor editor en e festival de Asia films Awards, y consiguiendo ganar la Espiga de Oro por la mejor actriz Zhou Dongyou, en la Seminci de Valladolid. Los críticos la llegaron a dar una buena nota, y en España tardo en llegar a estrenarse dos años.

Jing es una joven estudiante que tiene que ir con una familia de un pueblo, para vivir y estudiar para ser una profesora. Dentro de la ley que llego a ordenar el mandatario Mao Tse Tung. Allí conoce a Sun, los cuales se enamoran a pesar de muchas trabas que lleva el amor entre los dos jóvenes en

unos tiempos tan duros. Por una parte Jing es la hija de una mujer deshonrada por la comunidad comunista, al haberse casado con un hombre de derechas, la cual sera observada durante todo el tiempo. Un mínimo fallo,puede suceder es que sea despedida y pierda todo lo poco que tiene. Su hija Jing, la mayor de tres hermanos, estudiara para ser profesora y dar mejor prestigio al apellido de su familia. Dentro de las aulas formativas, que se orientan en los campos, se enamora de un joven llamado Sun, el es correspondido con sus encantos, pero de una forma muy inocente, debido a la presión social que existía en aquella época. Un escándalo para Jing, o cual sería expulsada de la escuela y con una consecuencias muy negativas para su familia.
Pero el amor, cuando es puro, siempre llega a ser lo más bonito que le pueda llegar a pasar a una pareja. Por ello, Jing y Sun se ven a escondidas, y el propio Sun dobla la guardia para poder tener más días libres, y así, poder estar al lado de Jing. Siempre con miedo a ser descubiertos, pero con la sensación de que es solo amor. Un impulso que llegara a hacerles pasar por lados muy tristes, al mismo tiempo que dulces. Sin duda Amor bajo el espino blanco, es una película que te hará sentir que es el amor, y querrás ser amado de esa forma.

Me ha gustado.- Su recorrido visual, y su poetización, hasta en los momentos más oscuros y tristes.

No me ha gustado.- Que películas tan buenas como esta, tengan tan poca repercusión en las carteleras actuales.
Nota.-10/10.