Revista Moda
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¡Pues a lucirlas, suertuda! –pensaréis muchas de vosotras, sobre todo las de patitas más bien cortas-. Pues no siempre es así. Las “patilargas” también tienen sus problemas y necesitan disimular las extremidades inferiores cuando son muy largas en proporción con el tronco.
Recordemos aquí algunas de las claves que vimos en este blog para averiguar si nuestras piernas están proporcionadas:
Ponte de pie y comprueba si tu ingle está por encima de la línea de tus muñecas. Si esto es así, quizá tus piernas son algo más largas de lo que deberían.
¡Cuidado! Piernas largas = mujer alta, no siempre se cumple. Una mujer que mida 1.50 m. puede perfectamente tener las piernas largas. ¿Largas midiendo 1.50? Sí, largas en relación con su torso.
Nuestro objetivo será en este caso alargar visualmente la parte superior de la figura y acortar la inferior.
Toma nota de nuestros consejos:
FALDAS:
Aprovecha para lucir faldas cortas y minis con la cintura baja, que descansen en la cadera.
¡Cuidado con las minis muy minis! Con una falda excesivamente corta conseguirás el efecto contrario al deseado.
Llévalas sin cinturilla y con algún tipo de corte o dibujo que visualmente divida la prenda y ayudará a tus piernas a parecer más cortas.
Evita las faldas de talle alto.
Las que no tienen que preocuparse por los kilos de más, pueden aprovechar para ponerse faldas con mucho volumen, con adornos, estampados y superposiciones.
VESTIDOS:
Si eres alta aprovecha para ponerte vestidos largos.
Si tienes una altura media-baja, resultan perfectos los vestidos de talle bajo, con cinturas anchas. Si tiene varios colores, procura que los estampados y los colores claros se sitúen en la parte inferior del cuerpo.
PANTALONES:
Unas piernas largas justificarían el uso de los pantalones con vuelta en los bajos, los capri, pescador o pirata (pero recuerda que en el post que dedicamos a este tipo de pantalones los calificamos como de “very dangerous”).
Evita los pantalones de talle alto y, por supuesto, los rayados verticalmente.
Los de cuadros son una buena alternativa, al igual que los amplios, con pata de elefante o incluso los harem.
PRENDAS SUPERIORES:
Ya que lo que pretendemos es estilizar la parte superior y empequeñecer la inferior, necesitaremos prendas superiores un poquito largas y sueltas. Si evitas entallar la parte de arriba consigues disimular el punto exacto en el que se sitúa tu talle.
Semáforo rojo a las blusas y camisas por dentro, a las chaquetas toreras y a las de talle alto en general.
COMPLEMENTOS:
Los cinturones juegan un papel muy importante a la hora de realzar o disimular este tipo de desproporción. Situados en la cadera –siempre que las proporciones de esta última lo aconsejen- pueden convertirse en tus mejores aliados.
El calzado también contribuirá a alargar o acortar las piernas.
Reducen su longitud: Zapatos con pulsera en los tobillos, con la punta redondeada, los bicolor o los botines, las botas cuando hay contraste de color con la pierna...
Mientras que los zapatos altos, con el empeine bajo y despejado y terminados en punta, alargan visualmente las piernas.