Sidonie en Japón: Un viaje a Japón sin levantarse de la butaca

Por Vera Carrasco.

Sidonie (Isabelle Huppert) viaja a Japón por la reedición de su primer libro. Allí se encuentra con su editor (Tsuyoshi Ihara) y juntos comienzan una gira por todo el país para promocionar de nuevo la obra. Un drama íntimo sobre cómo aprender a vivir con los fantasmas del pasado (y del presente), lleno de choques culturales y un romance entre personas de más de 50 años, que rara vez vemos en pantalla. Sidonie en Japón: Un viaje a Japón sin levantarse de la butaca Lo más destacable de la película es, sin duda, la fotografía. Es una obra muy visual, centrada en los planos de los paisajes, que te hacen querer organizar un viaje a Japón en cuanto sales del cine. Ahora debería destacar el sonido y la banda sonora, pero casi no hay en esta película, y tan poco hace falta. Las imágenes hablan por sí solas, por lo que los silencios las acompañan de maravilla. En momentos muy puntuales podemos escuchar un suave piano que complementa muy bien los planos de grandes rascacielos de las ciudades que aparecen. Sidonie en Japón: Un viaje a Japón sin levantarse de la butaca Obviamente no es la mejor actuación de Isabelle Huppert, pero no puedo dejar de destacar su interpretación porque me parece que está magnífica en todo lo que hace, y esta película no es menos. La actuación de Tsuyoshi Ihara es también de 10. Un aspecto a resaltar también es el vestuario, el cual va cogiendo carácter propio durante todo el filme. Si estás muy atento durante toda la película, descubrirás que en la escena final hay una referencia muy tierna relacionada con la vestimenta. Sidonie en Japón: Un viaje a Japón sin levantarse de la butaca Puede ser que la película se haga un poco lenta, a pesar de que solo dura 95 minutos. Pero tienes que sumergirte dentro de la película para poder entenderla bien, ya que si no, habrá referencias y detalles importantes que pasarás por alto. Esta es la clara demostración de que la gente mayor también se puede enamorar, de que hay vida más allá de la muerte y de que viajar te enriquece. Una mezcla entre Volver y Before Sunrise, con pequeños toques de comedia y muchas reflexiones sobre la soledad y la muerte.