Recientemente ha sido elegido un nuevo Papa después de las votaciones en el Cónclave realizado por los cardenales electos. Dado los tiempos que vivimos, mucha gente no entiende por qué la mujer no tiene ningún papel en esta elección. ¿Por qué la mujer no tiene derecho ni voz ni voto para decidir en la iglesia o en nuestra sociedad en muchos estamentos? Mucha gente cree que la mujer ya está integrada en la sociedad y se le ve como una más, aunque yo estoy convencido que sigue teniendo un papel secundario. Pero NO siempre ha sido así....
Hubo una civilización extraordinaria hacia segundo milenio a.C en la isla de Creta, la isla del rey Minos, donde construyeron edificios con conducciones de agua caliente, residual, de lluvia...
Una civilización totalmente matriarcal, pacífica, en la que según los restos artísticos y arqueológicos nos demuestran que era una sociedaden la que la mujer era el epicentro de ésta, una sociedad en la mujer tenía un papel predominante sobre el hombre, algo lógico ya que en una sociedad pacífica lo natural es tener hijos y criarlos, ytener hijos es un privilegio de las mujeres y no de los hombres.
Pero esa sociedad tuvo fecha de caducidad con la llegada a Europa de los Indoeuropeos, sociedad llegada desde la India hasta Europa. Esa sociedad basada en la guerra, en la conquista, en la explotación de esclavos, que tenía como pilar principal la dominación del hombre sobre la mujer, necesitaba afirmarse destruyendo por completo esa sociedad matriarcal basada en el poder del grupo, del clan, de la propiedad comunal y no privada que suponía ser un enemigo que ponía en duda sus ideales como civilización y que se instalaron en el poder en torno al año 1.600 a.C. y siguen en el poder hoy en día, 3.400 años después.
Digo esto porque podemos ver cómo hoy en día no ha cambiado nada, seguimos resolviendo nuestros problemas de las misma manera, a golpes. La guerra sigue siendo práctica habitual, sigue siendo un negocio, una industria.
La guerra es un negocio que sin la cual, el hombre no tendría sentido ya que éste es más eficaz que la mujer en este aspecto.
Este modelo de sociedad Patriarcal ha triunfado porque ha conseguido meternos en la cabeza que lo importante no es criar hijos, sino el trabajo y sólo aquél que consigue trabajo puede sentirse socialmente reconocido.
Esta sociedad patriarcal ha creado modelos negativos de mujer como María Magdalena, Helena de Troya o Pandora, cuya historia está escrita en este blog.
Seguiremos hablando del trabajo en la siguiente entrada del blog "La pesca de la Marea".