Numeradas, sin música y con crestas, la semana de la alta costura de París echó el cierre con el toque cañero de Jean Paul Gaultier y con los volantes rosa palo, sin olvidar el rojo en el desfile de Valentino.
Numeradas, sin música y con crestas, la semana de la alta costura de París echó el cierre con el toque cañero de Jean Paul Gaultier y con los volantes rosa palo, sin olvidar el rojo en el desfile de Valentino.