Revista Cultura y Ocio

Siempre será diciembre, Wendy Davies

Publicado el 06 mayo 2017 por Conejo Blanco @DetrasdelConejo

Siempre será diciembre, Wendy Davies

Sam ha muerto. El mar se llevó sus secretos y ahora solo quedan mentiras y esa sensación de ahogo que todo lo envuelve. Samantha no es ella misma. Jay no sabe lo que hizo. Todos tienen algo que ocultar y cada día que pasa es una cuenta atrás. Mañana quizá sea tarde.

Siempre será diciembre, Wendy Davies

Hacer una reseña de Wendy Davies siempre se me hace muy complicado, no os hacéis una idea, porque sus libros siempre significan mucho para mí. Muchísimo. Una recuperación. Una amistad. Un salvavidas, en esta ocasión. Siempre que me preguntaban cuál era mi libro favorito de ellas tenía que callarme porque no podía hablar de Siempre será diciembre. No sabía si podría ganar el Gran Angular. No sabía cuándo vería la luz. Solo deseaba que pudieran compartir esta historia tan necesaria con todo el mundo.

Y cuál fue mi sorpresa cuando el 18 de abril me entero que sí. Que es real. Que Fátima y Merche han ganado el Gran Angular. Que Wendy Davies tiene un premio que les da un reconocimiento como escritoras que para mí tienen desde hace mucho tiempo.

Muchos ya tendrán apuntado este libro en wishlist o en to read sólo por el premio. Por la curiosidad. Pues... Yo vengo a contaros todo lo que sentí y todo lo que me produjo este libro que como ya veis a mí me ha enamorado. Pero tranquilos, no hay spoiler.

Para mí ha sido un redescubrimiento puesto que había cosas nuevas y aún así me ha enamorado aún más. Pensé que no me emocionaría, que no me pondría la piel de gallina. Pero volvió a ocurrir, me volví a emocionar, me volvió a faltar el aire, volví a sentir todo lo que sentí aquella vez.

Tenéis que saber que los libros de estas dos autoras siempre llegan en el momento correcto. Hace mucho tiempo les comenté que me encantaría leer algo sobre el duelo, me parecía necesario. Pocas veces lo tratan los libros o lo hacen de una manera en la que yo no logro empatizar así que yo quería leer un libro en el que el duelo que sufrieran los protagonistas fuese un duelo con el que yo pudiera sentirme identificada. Porque sí, hace unos años yo sufrí un duelo muy doloroso, algo que no supe gestionar y que me rompió el corazón, fue un duelo distinto del que refleja esta historia, en mi historia no se murió nadie pero para mí fue diciembre durante mucho tiempo. Demasiado.

Eso es lo que le pasa a Samantha, la protagonista, su hermano mellizo Sam muere, y de pronto todo le pesa. Todo pierde sentido. Todo es negro. Todo es frío y cae diciembre sin que ella se de cuenta. La familia de los Flynn está rota: Una madre fantasma, un padre que vive de recuerdos, y cinco hermanos. Sam, la única chica procura camuflarse y ser un chico más, no destacar. Está tan rota que vive de mentiras porque así no enfrenta a sus miedos.

Por otro lado tenemos a Jay, el mejor amigo de Sam, que está devastado tras la pérdida de su ser más preciado. Su persona favorita. Ambos se sienten ahogados sin él y ambos necesitan recomponerse.


Y adivinad, por último tenemos a Sam que es el eterno protagonista aunque no sea el narrador porque Samantha y Jay lo tienen tan presente que tú pasas a tenerlo también. Los capítulos de Jay suelen estar dirigidos a él y en muchos capítulos vemos los "Sam diría esto", "Sam diría lo otro". Lejos de parecer pesado hace que sea una lectura real y desgarradora, porque no pueden dejar de pensar en su persona favorita, aquella persona que hasta hace nada estaba siempre con ellos. Por supuesto, hay más personajes pero ellos son la clave para mí.

Pero en este libro no todo es blanco o negro. Cada uno esconde sus secretos. Algunos más que otros. Samantha es la que se lleva la palma. A veces que una persona sonría o que se muestre que sea valiente no significa que lo sea. Para mí los capítulos más desgarradores fueron los de ella, con los que me sentía identificada. Muchas veces me descubría aguantando la respiración.

No os voy a mentir, es una lectura intensa y desgarradora, llena de secretos que te sorprenden en todo momento. Hay un capítulo que me puso especialmente los pelos de punta y fue el capítulo 13. Si lo habéis leído espero que me contéis. Sobre la trama tendréis que descubrirla.

Y sobre la escritura de Wendy Davies qué os puedo contar. Este libro no tiene ese toque de cuento antiguo pero sigue teniendo la magia característica de ellas. En ningún momento se aprecia que son cuatro manos las que escriben. Además, la redacción de este libro es más directa pero la más sobrecogedora de todos. En realidad os podría decir mucho más pero creo que decir que tienen calidad y un estilo propio sobra, ya se sabe. Lo que me alucina de ellas es la capacidad para emocionar, de romperte el corazón y curártelo. De sanar heridas que tenías.

Para mí sus libros son compañeros de etapas que he tenido. Son mi salvavidas literario porque me veo reflejada y veo el daño que pueden hacer -en este caso- las mentiras. Los estoy bien, las sonrisas fingidas, la valentía fingida, la pérdida. Entonces cuando cojo un libro de ellas y las leo siento que me curo. Siento que siempre tienen el mensaje necesario que trasmitir. El mensaje de este libro es que todo pasa, Aunque no lo creas. Aunque sea lo más horrible que puedas creer que sientes. Aunque ahora mismo tengas el corazón roto. Todo pasa y estarás bien, lo vas a estar. Y sí, tiene más mensajes: La importancia de forjar tu identidad, el peso de las mentiras... Pero el que más me marcó fue ese.

¿Y sabéis? Para mí la literatura actual, sobre todo la juvenil, tiene que trasmitir enseñanzas tan importantes como esa. Así que volviendo a la pluma de estas autoras, sé que son buenas porque si un libro no te rompe, si un libro no te enseña, estás simplemente ante un libro entretenido. No un libro que te ha marcado. Y cuando eso ocurre, cuando una historia te deja huella, sabes que estás ante unas autoras con magia. Como ellas.

Así que para mí es una lectura más que recomendada. Es de mis libros favoritos y mi mejor lectura en lo que va de año. Y a Wendy Davies sólo me queda darle las gracias por hacer libros tan necesarios y por salvarme una y mil veces con su magia.

Siempre será diciembre, Wendy Davies

¿Vosotrxs lo habéis leído? ¿Conocíais a las autoras? ¿Tenéis ganas de conocer a Sam y a Jay?


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