Una maratón, (o media maratón para algunos), las Spartan Race, o carreras de endurance ( muy de moda actualmente) así como una triatlón supone una dura prueba para muchos. En las dos primeras, por la resistencia de la prueba ya que no todo el mundo está acostumbrado o puede correr 21 o 42 km en una sola sesión. Y tampoco os animo a hacerlo a no ser que estéis suficientemente entrenados. Yo misma, todavía no me he atrevido a hacer una maratón entera, y dudo que a este paso la realice, pero no por ello, no dejo de entrenar y dedicar como mínimo media hora al día a un trote ligero.
En cuanto a las duatlones o triatlones, se combinan diferentes especialidades como el running, la natación o el ciclismo, además de toda la presión que supone participar en una competición de este calibre. SI alguno de vosotros está interesado en comenzar, quizá una duatlón puede ser lo más sencillo al principio.
Pero en todos los casos, la preparación que han de llevar los competidores es clave, ya no sólo física, sino también mental. En este post os mostraremos 7 consejos fundamentales para afrontar estas pruebas de resistencia:
Constancia. No es llegar y ponerse a correr. Una competición no se prepara en un día, sino que debe ser fruto de un trabajo a tiempo completo en el que se debe entrenar todo el cuerpo, para todo tipo de formatos
Fuerza. Entrenar. Entrenar y entrenar. Eso está bien, pero además de entrenar el cuerpo o la fuerza física, ¿Qué me decís de la fuerza psíquica? ¿La habéis entrenado? Pues ya podéis comenzar a trabajar en ello, ya que tener una gran fuerza mental es una buena manera buena de superar todos los obstáculos que puedan aparecer.
Mindfulness. Este punto viene ligado al anterior. Entrenar la mente (o aprender a calmar los pensamientos negativos). Volverse loco con los resultados, tanto antes, como después de la competición, no tiene sentido. Dejad las obsesiones y céntrate en la participación, siempre cuenta más la experiencia.
Capacidad de sacrifico. Esta parte quizá algunos no lo entienden del todo, ya que el corazón puede mandar más o menos que el cuerpo. No es algo sencillo, por lo que debemos estar muy concienciados de lo que vamos a hacer, el esfuerzo que va a suponer y, sobre todo, hasta dónde podemos llegar.
No darse por vencido. Ser capaz de seguir adelante es una cualidad que define a las personas que participan en este tipo de eventos. Es una prueba dura, pero todo el esfuerzo de los entrenamientos vale la pena para conseguir luchar hasta el final. (¡Ojo! A no ser que tengáis una lesión o dolor tan importante que os impida seguir adelante. Tampoco vamos a poner en riesgo nuestra salud).
Confianza. Poder es querer. Todo el tiempo que habéis dedicado a entrenar cosechará sus frutos cuando crucéis el arco de meta. Tened confianza en vosotros mismos, sed positivos, actuad con una gran sonrisa y veréis cómo los resultados siempre serán satisfactorios.
Ilusión. Cómo dice el refrán: !De ilusión también se vive! Además de todo el sacrificio, este tipo de pruebas suponen una gran ilusión. Se viven con entusiasmo desde el principio, hasta el final. Saboread cada segundo, aunque sólo sea por vivir la experiencia, solos o en equipo. ¡Merece la pena!
Estos siete consejos básicos pueden aplicarse a cualquier otra dura prueba que nos pueda plantear la vida (queramos o no). Mi consejo: Releer un par de veces estos "consejos básicos" y tenerlos siempre cerca por si algún día podemos necesitarlos.
¿Y vosotros? ¿Estáis preparando alguna prueba deportiva? ¿Aunque sea de 5 km? ¿Añadiríais otro punto a estos consejos? Estaré encantada de leer vuestros comentarios!
Besos desde mi blog!