Sillas Charles Eames de diseño

Sillas de diseño de Charles Eames

Cualquier diseñador entendido no dudará en afirmar que tanto Charles Eames (1907-1978) como su esposa Ray (1912-1988) son dos de los diseñadores norteamericanos que más han influido en el diseño y la arquitectura del siglo XX.

Es por ello que no hemos querido dejar pasar la oportunidad para acercar los diseños más innovadores y famosos de esta creativa pareja, a su hogar o a su ambiente de trabajo, por mucho menos dinero del que cabría imaginar ya que el diseño no deje estar reñido con el bolsillo.

Una explosión de creatividad

Tanto Charles como Ray Eames fueron diseñando diversos modelos de sillas, mesas, sillones, butacas y mobiliario en general que tuvieron tal aceptación en la sociedad norteamericana primero, e internacional después; que han terminado convirtiéndose en auténticos clásicos objetos de deseo.

En las imágenes observamos parte de los diseños que más huella han dejado, así como a Ray y Charles Eames con parte de sus creaciones.

Cuando el plástico es arte

El matrimonio Eames fue uno de los primeros en experimentar con el revolucionario plástico en una época que aún vivía de los últimos coletazos de la era industrial donde los metales eran los protagonistas absolutos.

Al nuevo material lo dotaron con una combinación de líneas minimalistas y modernas de forma que se convirtieron en un referente a la hora de crear un espacio de trabajo para reuniones de personal que aportara clase y desenfado, fomentando la creatividad y el diálogo.

Polipiel para el estilo urbano

Una de las innovaciones de Charles y Ray Eames fue la de combinar con el sobrio estilo urbano, la polipiel en distintas tonalidades. Y lo cierto es que casan bien al aportar la polipiel una sensación de mayor desasosiego y confort al, en ocasiones, duro ambiente urbano.

Las sillas y sillones diseñados por el matrimonio Eames se han convertido en todo un ejemplo de elegancia minimalista por la simplicidad de sus líneas, combinando de maera colosal el metal con la polipiel, dando lugar a cómodos sillones que se adaptan al cuerpo y que a la vez requieren de muy pocos cuidados para que se conserven como recién estrenados. Un suave paño de tela humedecido en agua con jabón bastará.

A pesar de sus finas líneas, los sillones Eames (Amabala, Denis y Eamer 1958) cuentan con una firmeza indiscutible permitiendo incluso balancearse en ellos sin riesgo alguno. Cuentan con reguladores de altura y de fijación, a la vez que su pie está provisto de cinco ruedas que permite el desplazamiento en cualquier dirección.

Por su parte los sillones de la línea Tower reciben ese nombre por los ingeniesos pies que imitan la estructura de la Torre Eiffel en París (Eiffel Tower, en inglés).

Sin embargo, si existe una estrella indiscutible del diseño Eames en polipiel, ese es sin duda la butaca Ottoman Edik que combina el acabado en madera con el blanco o el negro vistiendo con clase cualquier estancia en la que se ubique.

Para un estilo más desenfadado, las sillas diseño cojín son ideales al aportar aparte de clase, alegría y confort a la habitación.