Alfredo Corvalan
EL ARBOL
Todo el desarrollo del árbol nos muestra el pasaje de un mundo a otro. En general nos explica con símbolos el proceso de la iniciación y el misterio de la vida.
Desde la semilla que encierra las posibilidades latentes del ser, su ingreso a la "madre tierra", la muerte,, para volver a renacer cuando su brote sale a la luz, su crecimiento vertical ascendente, el desarrollo horizontal de sus ramas y hasta la generosidad del fruto, nos habla de la mutación que deberá experimentar el iniciado.
La iniciación supone un peregrinaje atravesando los diversos estadios del ser, partiendo de sus orígenes, o dicho de otra manera en la búsqueda de si mismo. Quienes se decidan iniciar el ,viaje deberán ingresar en una profunda reflexión para despojarse de lo superfluo y material y así encontrarse acompañado de sus valores, que le permitirán meditar sobre las vanidades del mundo y reconocer lo trascendente.
Es aquí donde el aprendiz comienza a experimentar la transmutación, no dejando que lo atrape el tráfago del mundo exterior y paulatinamente lograr un recogimiento interior que lo elevara de la materia mas densa a un mundo espiritual.
Una segunda etapa es la purificación por el agua donde el iniciado es sometido a un primer bautismo para "lavar sus impurezas" En referencia al libro v Sagrado del Cristianismo podemos asimilar este paso al que se menciona en el Evangelio de San Juan 3. 16 este paso al que se menciona en el Evangelio de San Juan 3. 16 La ultima etapa de los símbolos del fuego, que ha sido representada en todas las tradiciones como la sublimación del espíritu sobre la materia, traen la calma y la serenidad de la reflexión alcanzada a través de la perseverancia en el trabajo cotidiano en la obra constructora.
Todo camino permite visualizar como se atraviesa un rio de un lado al otro, donde cada orilla representa una forma diferente del ser. El puente es como un "arco iris" el símbolo que une las dos márgenes del rio, ambas encarnan las energías celestes y su descenso al mundo teres.
La Puerta del Templo es el umbral que separa al mundo ordinario del espacio sagrado y significativo. Este símbolo también se asocia a las llaves, sin las cuales las puertas difícilmente pueden ser abiertas.
A su vez el simbolismo de las puertas solsticiales alcanzan en los signos de "cáncer" (llamada la puerta de los Hombres) y en el de "capricornio" (o puerta de los Dioses) las etapas por donde deben pasar las almas no purificadas, la primera, debiendo regresar a otro estado del ser y por la segunda "la puerta estrecha del evangelio cristiano" que sólo pueden atravesarla las almas que se han fundido con el espíritu al completar el ciclo de la transmutación.
Referencias bibliograficasLibro: "El Simbolismo Constructivo de la Francmsasoneria" de Alfredo Corvalan.
Web Site: www.gadu.org/ Símbolos Emblemáticos de la Tradición Universal