Sin jóvenes involucrados en el cambio, el futuro no es posible

Dieter Hundt, presidente de los empresarios alemanes, en La Contra de La Vanguardia, habla del secreto del sistema dual alemán empresa-escuela. Este secreto está en no separar nunca el trabajo de la formación, la empresa de la escuela…

Buscando entender nuestra situación, veo el documento de trabajo “Explicando el mercado de trabajo juvenil problemas en España: ¿Exclusión, Instituciones, o Cambio tecnológico? Realizado por Juan J. Dolado, Florentino Felgeroso y Juan F. Jimeno, y publicado por el FEDEA en febrero de 2000. Publicado hace 11 años, aunque refleja la cruda realidad actual.

En las Observaciones Finales, traducidas del original en inglés: “En este trabajo se ha analizado el papel de varios factores para explicar el pobre desempeño del mercado laboral de los jóvenes españoles durante las últimas dos décadas. El hecho de que las tasas de desempleo de los menores de educación (primaria) y educación (terciaria superior / universitaria) los trabajadores con educación se han cuadruplicado y triplicado, respectivamente, en los últimos veinte años, y todo ello a pesar de una enorme unidad de educación, puede que posiblemente se explique por una combinación de tres factores:
(i) el mercado de trabajo institucional factores como (contratos de trabajo a plazo, negociaciones salariales, etc.)
(ii) las habilidades sesgadas en el progreso tecnológico.
(iii) la sobre educación y el desplazamiento de los trabajadores con menor grado de educación por el aumento de los más formados que los sustituyen en sus puestos habituales de entrada al trabajo”

Cómo es posible que todas las políticas y el cuantioso capital invertido en formación no hayan dado resultado tangible alguno para nuestra economía.
Y cómo es que viendo la falta de resultados esperados se ha continuado en la dejación de las funciones de control. A la vista de los resultados podemos confirmar dos cosas, los políticos no tienen ideas frente a la complejidad de los problemas a los que nos enfrentamos, por lo que cabe pensar que en breve plazo no lo harán mejor que hasta ahora.

Por último, el único camino es innovar, emprender y apoyar a los que quieren innovar y emprender.

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