Con el guaperas de Bradley Cooper como protagonista y Robert De Niro de secundario de lujo tenemos una película que cumple su cometido sin que destaque en nada especialmente. A raíz de una pastilla que convierte en superdotado (mentalmente hablando) a quien la toma, nos encontraremos con diferentes situaciones más o menos creíbles y sobretodo con un manera de contar la historia algo precipitada pero que consigue evitar el aburrimiento para alegría del espectador. Se le puede dar una oportunidad si no tienes otra cosa mejor que ver.
Mi puntuación: 5/10