Sin Madrid 2020

Ser o no ser e ahí la cuestión, la pregunta, la incógnita, la incertidumbre, el pensamiento, el ejercicio de la no..voluntad, la ironía, la batalla entre el bien y el mal, la respuesta a la pregunta nunca hecha.No, no queremos referirnos a un solo, sino a un todo. Basamos nuestras preguntas en espera de una respuesta que ya no esperamos que sea respondida. No tocaba esta vez, quizá las anteriores eran circunstancias adversas, pero legítimas a fin de cuentas. Hoy día era sólo un sueño convertido a mal sueño. No se trata de olvidar y pasar página, se trata de aprender que la corrupción que ha existido en España en los últimos años nos está pasando factura ahora, y no son transcripciones de un extesorero en paro y en la cárcel por delitos aún sin esclarecer o descubrir, sino por delitos contra El Reino de España y sus gobernantes sin vergüenza que han tirado de ilusión del pueblo y también de sus ahorros, convirtiéndolos junto con el Banco de España en preferentistas participantes de acciones llevadas a la decadencia del olvido.
Es la injusticia del mundo en el que vivimos. Antes soñábamos con Ser, con llegar a ser. Pero la sociedad, los cambios culturales, las crisis, el politiqueo barato, nos convierte y nos hace torpes. Creemos saberlo todo: Economía, letras, política, ciencia, psicología, publicidad,  relaciones públicas, amor, filosofía orientada..., pero realmente no sabemos nada. Y así debe de seguir siendo para el bien de unos pocos y el mal de unos muchos. Nos están convirtiendo en ignorantes del saber, del conocimiento, de la verdad. "El conocimiento os hará libres" dijo Sócrates, aunque posteriormente la iglesia católica lo modificó levemente en "El saber nos hará libres", éstos como en política, han tergiversado a su antojo a un pueblo ¿libre?, felizmente ignorante y desconocedor de la verdad, del saber, del verdadero Ser.
Así nuestras futuras generaciones no llegarán a ser. No hay más que ver tanto recorte en educación y ciencia. El I+D, ha pasado a ser Ignorancia más Demócrata. Si por un instante fuéramos capaces de entender el verdadero significado de soportar el peso de la vida sin la ayuda de la cabeza pensante de los "especialistas".
Seamos lo que fuimos. Busquemos dentro de nosotros mismos, no se trata de ser sólo la élite mundial en el deporte y llevarlos en masa para que nos vean. Se trata de querer aprender, de demostrar que España habla idiomas y lenguas, que no tenemos por qué ceñirnos a un inglés vallecano, que sabemos tomar Café de Colombia hablando Latín como nuestros ancestros romanos en la Plaza de España y pidiendo las cosas por favor, de usted y dando las gracias aunque no tengamos ninguna.

Duelen ciertas imágenes bochornosas en un país demócrata y de Soberanía con ciertas historias noostras sin resolver. Pero mientras nuestro voto no cambie, tendremos que seguir soñando con incertidumbres del aprendizaje y la esperanza de que algún día, cuando la recesión nos abandone y la corrupción y el dopaje sean agua pasada, de volver a soñar con una sede olímpica en ésta, nuestra ESPAÑA.