Sincronizar los datos es una práctica común tanto para usuarios como para empresas, pero es fundamental entender que sincronizar no es lo mismo que respaldar. Aunque la sincronización garantiza que los datos estén actualizados en dos o más dispositivos, no asegura la recuperación de los datos ante un desastre.
¿Qué es la sincronización de datos y cómo funciona?
La sincronización de datos implica que cualquier cambio realizado en un conjunto de datos se reflejará en todos los dispositivos sincronizados. Sin embargo, este proceso elimina las versiones anteriores de los datos, lo que significa que, en caso de un desastre, no se garantiza la recuperación de las versiones previas.
Aunque la sincronización es conveniente para mantener los datos actualizados en varios dispositivos, es crucial distinguir entre la sincronización y los respaldos en términos de protección de datos.
Diferencias entre sincronización y respaldo de datos
Los servicios de sincronización suelen emplearse para sincronizar datos entre un servicio en la nube y un dispositivo físico, asegurando que los datos estén constantemente actualizados y accesibles. Sin embargo, cualquier eliminación realizada en un conjunto de datos se replicará en el otro, lo que imposibilita la restauración de versiones anteriores de los datos almacenados en la nube.
Por otro lado, los servicios de respaldo crean copias duplicadas de los datos y los almacenan en un destino secundario, como un disco duro externo o en la nube. Estos servicios mantienen múltiples versiones de los datos, permitiendo restaurarlos a un punto anterior en el tiempo si es necesario.
Por qué la sincronización no es suficiente
Servicios como Google Drive, Dropbox, NextCloud y OneDrive permiten mantener los datos sincronizados entre varios dispositivos. Aunque esto facilita la colaboración en equipo, también aumenta el riesgo de pérdida permanente de datos si alguien edita o elimina documentos de manera accidental, y esos cambios se sincronizan en todos los dispositivos.
Es hora de respaldar sus datos
Respaldar los datos ofrece numerosas ventajas. Permite el acceso inmediato a los datos sin preocuparse por la pérdida permanente. Los usuarios pueden respaldar configuraciones de dispositivos, sistemas de archivos, archivos individuales y carpetas, y restaurar sus datos en cualquier momento.
Además, los servicios de respaldo utilizan capacidades de versionado para mantener múltiples versiones de los datos, que pueden ser accesadas y restauradas cuando se necesiten. También es posible establecer políticas de retención personalizadas que optimizan la capacidad de almacenamiento y configurar horarios de respaldo automático.
En conclusión, aunque la sincronización de datos es útil para la colaboración y el acceso remoto, los respaldos proporcionan una seguridad adicional al permitir la recuperación de datos a versiones anteriores, lo cual es esencial para una protección de datos completa y efectiva.