Por su bien, espero que nadie dude de mis 27 primaveras al ver las patas de gallo (las de mis ojos, no el estampado del pantalón), la piel menos tersa y los primeros efectos de la odiosa ley de la gravedad.
"Después de tantos días perfectos, empecé a creer de verdad que toda la vida sería así"
(Peter Pan)
Tengo 27 años. Es la edad en la que mi amiga Angie y yo convenimos que es mejor plantarse. Nadie espera de tí que cometas las torpezas de los 20, pero tampoco te avisan de que se te está pasando el arroz como a los 30. No falla. Es pasar de la treintena y el mundo entero empieza a preocuparse por tu aparato reproductor. Bien, gracias. Por eso yo prefiero cultivar mi estilo Peter Pan.
Apuesto por volver a los 27 con este look entre Peter Pan y duendecillo. Una capa corta blanca, un jersey abrigadito negro, pantalón corto Peter Pan y botas bajas y negras.
El toque Wendy de este look de cuento lo ponen las infantiles horquillas del pelo con piedra no-preciosa incluída, y esos adornos.... ¿cómo los llamaría yo? Sí, esos manguitos de lana y oro que en Calzedonia vendían para cubrir los zapatos y yo uso para dar un rollo distinto a las mangas de las chaquetas.
Espero que nadie ponga en tela de juicio mi alma Peter Pan. Que nadie me diga que se me está pasando el arroz. Y por si a estas alturas, también os preguntáis por el estado de mi aparato reproductor. BIEN, GRACIAS.