El síndrome postvacacional no está aceptado como enfermedad en los principales clasificaciones internacionales, aunque sus síntomas los pueden experimentar un gran número de personas.
La mitad de los españoles podría sufrir el síndrome postvacacional según el Instituto Superior de Estudios Psicológicos.
Esta cifra ha aumentado en los últimos años ya que en 2008 afectaba al 35% de los españoles.
Características del síndrome postvacacional
El Dr. Francisco Javier Lavilla de la Clínica Universidad de Navarra apunta las características más habituales de este síntoma:
- Debilidad generalizada y astenia que puede ser acompañado de insomnio.
- Menor capacidad de concentración.
- Disminución de la capacidad de toma de decisiones.
- Puede desarrollarse un carácter más violento que perjudique las relaciones personales, tanto en el trabajo como en casa.
- Sensación de desconcierto, inquietud e inseguridad.
De ahí, los expertos apuntan que los principales síntomas del síndrome postvacacional sean: la ansiedad, la depresión, presentar malestar, cambios de humor, estrés, cansancio, dolores musculares.
Conseguir que el síndrome postvacacional no sea nuestro compañero en la vuelta al trabajo requiere de un trabajo previo y de concienciación para adaptarnos a la nueva rutina. Para conseguirlo de forma satisfactoria podemos seguir los siguientes consejos que médicos especialistas de Advance Medical proponen:
- Realizar una adaptación gradual.
- Dormir por lo menos ocho horas al día.
- Establecer unos horarios y rutinas regulares.
- Realizar algo de ejercicio.
- Ser realistas y proactivos.
Aunque parezca ser un problema solo de adultos, el síndrome postvacacional también puede afectar a los niños en la vuelta al cole. Así lo aseguran desde la Asociación de Psiquiatría Privada. Para ayudar a los más pequeños de la casa a pasar por este periodo de adaptación es importante pasar tiempo con ellos para que les sea más llevadero.
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