¡Singing in the rain!

Este no va a ser un post como los demás. Hoy quiero que sepáis que vuestro apoyo es un pilar importante que me ayuda en estos días difíciles para mí

Si me seguís por las diferentes redes sociales ya sabréis que hacia finales de Febrero empecé con un dolor de lumbares que se fue agravando hasta mandarme al hospital donde he estado 8 laaargos días. Y después, la convalecencia en casa que está siendo de lo más duro que he pasado en mi vida.

Este problema con las lumbares me está enseñando varias cosas. Una de ellas es la importancia de hacer ejercicio y tener unos abdominales desarrollados para este tipo de dolencias. No sólo se hace ejercicio para adelgazar sino que hay que hacerlo por salud. Yo hago Pilates con regularidad pero mi problema es degenerativo así que parece que no es suficiente y tengo que cuidarme con más atención

Otra cosa muy significativa que he aprendido es que he averiguado la cantidad de paciencia que puedo llegar a tener. Creo que nadie sabe cuánta paciencia tiene hasta que no pasa por un problema parecido. Darte cuenta que de un día para otro necesitas ayuda hasta para ponerte unos calcetines no es una sensación agradable. Y yo tengo suerte pues vivo con alguien magnífico pero claro no siempre está a mi disposición, tengo que saber esperar a que termine lo que esté haciendo o a que llegue donde estoy para poder ayudarme…

Ahora mismo, escribiendo este post, tengo que parar de cuando en cuando para levantarme de la silla y dar un paseo por la casa. Si estoy mucho tiempo de una forma determinada mis lumbares empiezan a quejarse.

Así que he aprendido a tener paciencia y tomarme la vida con muucha calma. Y ahora creo positivamente que es algo que todos deberíamos hacer de vez en cuando. Parar, respirar hondo y bajar una marcha a nuestras vidas. Muy en la onda de la corriente Slow que tan de moda está estos días

Otra cosa que he aprendido es que aunque estés tan mal que ni siquiera salgas a la calle o recibas visitas, no es aconsejable dejarse. Por ejemplo, si te tiñes el pelo, como yo, no dejar de hacerlo, seguir con los rituales de belleza dos veces al día, elegir ropa simpática y colorida para estar por casa y todo lo que se os ocurra para seguir siendo vosotr@s mism@s.  Pues he experimentado la importancia de que cuando te mires al espejo te guste lo que ves.

Si me paro a pensar: no tengo ni un minuto del día sin dolores, no puedo salir de casa, no puedo vestirme sola, necesito ayuda para levantarme de la cama y encima me miro al espejo y veo una especie de “bruja” con 10 años más que yo …. Creo que eso deprime a cualquiera, no creéis.

Así que mi consejo es que cualquiera que lea esto y esté en una situación parecida a la mía lo mejor que puede hacer es cuidarse y mimarse así mismo. Hombre, si además tienes un apoyo incondicional a tu lado que te facilite llevarlo a cabo ayuda mucho. En mi caso ese apoyo ha sido “maridin”. ¡Muchas GRACIAS amor!

También he aprendido a saber agradecer todo: lo que tengo, lo que he conseguido y lo que soy. Así que tengo la necesidad de daros a todos las GRACIAS públicamente.

GRACIAS a todos los que me habéis llamado por teléfono o mandado un WhatsApp para saber cómo estoy

GRACIAS por pasearos por mi cuenta de Pinterest

GRACIAS por darme ánimos a través de Facebook

GRACIAS  pues la página de Facebook  ha llegado a los 500 seguidores

GRACIAS por apoyarme e intentar entenderme a través de Instagram

GRACIAS por preguntar qué tal voy a través de Twitter @LanenaImagen

GRACIAS por estar cerca de los 500 seguidores en Twitter

Y sobre todo GRACIAS por leerme pues vosotros hacéis que la media de visitas al blog sea de 400 diarias.

En definitiva, he aprendido a saber tomarme las cosas por el lado bueno. Creo que esto ha sido lo más difícil de asimilar. El lado bueno de estar tantas semanas con dolor en cama y encerrada en casa, en mi caso, es eso: darme cuenta de cuántos amigos he recopilado por todo el mundo gracias a las redes sociales, saber tener paciencia, saber agradecer, saber que tener buen aspecto físico no es algo superficial pues sirve para no deprimirse, saber que mi pareja es LA PAREJA de mi vida…

y sobre todo saber que soy más fuerte de lo que pensaba. Así que ha merecido la pena

Creo que esta canción del mismo nombre que la mítica película “Singing in the Rain” con Gene Kelly es un poco como una metáfora de lo que intento transmitiros. Hay que poner buena cara al mal tiempo

A día de hoy, como ya he dicho, sigo con mi dolencia y no sé cuánto tiempo más tardará en curarse pues es un proceso lento. Mientras tanto, seguiré escribiendo en el blog que me encanta y continuaré buscándome la vida (como siempre he hecho) para probar nuevos productos, analizar tendencias, descubrir nuevos creadores y diseñadores, etc…

Sólo espero que sigáis ahí para leerlo como hasta ahora GRACIAS DE CORAZÓN