Cuando una mujer quiere ser madre, a veces la ansiedad le hace ver síntomas del embarazo allí donde no los hay o puede confundirlos con dolencias habituales. Para eliminar cualquier tipo de dudas y poder confirmar vuestras sospechas, hoy os vamos a hablar de los primeros síntomas de embarazo antes de la primera falta de la menstruación, ya que algunos pueden llegar a mostrarse antes esta gran señal que confirma el embarazo.
Incluso hay mujeres que días antes o después de su ciclo menstrual pueden tener un ligero sangrado o manchas marrones en tu ropa interior, que pueden confundirse con la regla. Sin embargo, esto puede ser un indicador de que estás embarazada y se conoce como sangrado de implantación, que indica que el óvulo fertilizado se ha adherido a la pared uterina y esto hace que se desprenda algo de fluido. Este sangrado es mucho más leve que la regla y sólo suele durar entre uno y tres días, pero si tienes dudas observa si tienes otros síntomas.
A veces el cuerpo de la mujer empieza a mostrar los cambios derivados de la gestación antes, convirtiéndolos en síntomas del embarazo. Las náuseas y la aversión a determinados alimentos u olores, son los primeros síntomas de embarazo para muchas mujeres. Las ganas de vomitar por la mañana o incluso el vómito y el rechazo a comer jamón o beber café pueden significar que estás esperando un bebé.
Solemos escuchar que la naturaleza es sabia y es así. Por esto, en el primer trimestre del embarazo se rechazan instintivamente alimentos y olores, que pueden ser perjudiciales para el bebé.
Algunas embarazadas rechazan el olor a tabaco u olores intensos como perfumes o sustancias con aromas fuertes. Esto puede provocar náuseas y se debe al cambio hormonal que el cuerpo experimenta en las primeras fases de la gestación.
Estos cambios hormonales también pueden provocar antojos en el embarazo, uno de los primeros síntomas que aparecen, ya que todos los cambios pueden tener un impacto muy poderoso en los sentidos del gusto y el olfato.
Algunos nutricionistas y médicos consideran que ciertos antojos durante la gestación pueden surgir para compensar una necesidad nutricional y no se deben a los cambios hormonales.
Independientemente de las razones por las que surgen los antojos, seguro que has escuchado combinaciones de comidas extrañas que algunas embarazadas han comido y tras el parto les da asco pensar en ello. Incluso, según la revista científica del Smithsonian hay antojos muy extraños, mujeres que desean comer cosas que no son ni siquiera comida como esponjas, tizas, jabón, cerillas, caucho y tierra. Sin embargo, los más comunes son antojos de alimentos dulces, salados, picantes y cítricos.
Junto a estos, otro de los clásicos síntomas del embarazo es el cansancio constante. Duermes ocho horas, echas la siesta y aun así a las ocho de la tarde quieres irte a la cama. Eso puede significar una caída extrema de defensas o un estado de buena esperanza. Durante los primeros meses de gestación se forma la placenta y de los principales órganos del bebé.
La placenta es un órgano único que se empieza a formar en la segunda semana del embarazo y cumple la función de servir de barrera de protección para el feto durante toda la gestación. Sin embargo, estudios recientes sobre la función tiene la placenta han hallado que es más que un mero conductor de nutrientes, y que también contribuye a su desarrollo neurológico del bebé. El desarrollo de este órgano vital para el feto supone un gran gasto energético que genera mucho cansancio en la futura madre, durante el primer trimestre del embarazo. Es importante que escuches a tu cuerpo y descanses siempre que puedas, sin sentir ningún tipo de remordimiento.
Estos cambios hormonales que ocurren al principio del embarazo podrían provocar hinchazón abdominal, podrías notar tu vientre más hinchado de lo habitual y que la ropa te puede apretar en la cintura desde muy temprano en el embarazo, aunque tu útero aún esté muy pequeño se empieza a desarrollar y esto ocasiona que incluso sientas que tus digestiones sean más lentas.
Un dato importante es no esperar a que se note el embarazo para empezar a usar una crema antiestrias, según explico en consejos útiles para la prevención de estrías durante el embarazo, en cuanto confirmes tu embarazo debes pensar a usar cremas o aceites hidratantes.
¿Frecuentas el baño más veces de lo habitual? El incremento de las ganas de orinar es otro de los primeros síntomas de embarazo, que comienza aproximadamente en la sexta semana de gestación y además puedes presentar este síntoma en el tercer trimestre del embarazo, cuando el peso del feto incrementa.
El incremento de ganas de orinar durante el primer trimestre de embarazo se debe a los cambios hormonales, estos hacen que la sangre fluya más rápido por tus riñones y que tu vejiga se llene con más frecuencia. Al eliminar con más frecuencia el agua, es importante que bebas más durante el embarazo.
La Agencia Europea de Seguridad Alimentaria recomienda una ingesta total de agua de 1,6 litros diarios para mujeres adultas. Además establece varias etapas de la vida en las que se requiere una ingesta mayor de agua y con un aporte mineral importante. Señala la importancia de la hidratación durante el embarazo y la lactancia, debido a que los requerimientos fisiológicos en agua y de ciertos minerales, como el calcio y el magnesio, aumentan. Por lo tanto, un agua mineral que asegure un adecuado aporte de minerales, como las de mineralización débil, es la más recomendada en estas etapas.
Las hormonas juegan un gran papel en el cuerpo de la mujer durante toda su vida, especialmente en aquellos momentos relacionados con su fertilidad. Con un embarazo protagonizan su propia revolución. Así, el aumento de peso y sensibilidad de los pechos o una tendencia a cambiar de humor de manera constante son otros de los primeros síntomas de embarazo.
Si presentas varios de estos síntomas no dudes en acudir a una farmacia o a vuestro médico para hacer un test de embarazo y desvelar si tus sospechas son ciertas.
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