Revista Conciertos
Mientras escribo estas líneas, en las pantallas del Festival de Cine Fantástico de Sitges deben estar proyectando las últimas maratones que sirven de cierre a tan maravilloso evento. Ya falta menos para la edición de 2015. Cualquier que haya vivido la experiencia Sitges -no, no me refiero a su igualmente famosa Gay Parade-, sabe aquello es mucho más que ver una película tras otra. Mi selección de títulos no ha sido tan afortunada como el año pasado; en aquella ocasión, mi olfato y el azar me llevaron a la consecución de un pleno: de cuatro películas, ningún truño. En el presente certamen he visto un poco de todo: cintas brillantes, chuminadas simpáticas y verdaderas pérdidas de tiempo. Sitges es así.
Jueves 09 de octubre.
Valió la pena madrugar para degustar "Relatos Salvajes", la coproducción hispano-argentina apadrinada por los hermanos Almodovar que recupera el formato de "La Dimensión Desconocida" o "Cuentos Asombrosos" para ofrecernos un total de 6 fábulas negras que retratan hasta que extremo el ser humano puede perder los papeles ante situaciones extremas. La bestia que llevas en tu interior disfrutará. Un par de horitas más tarde, el tandem galo Maury & Bustillo, tras el chasco que supuso "Livid", volvían a decepcionar con "Aux Yeux des Vivants" el patoso amago de slasher con protas pre-adolescentes. Cada vez queda más claro que su triunfal debut con la demencial "A l'Interiur" fue una casualidad. Por suerte, a media tarde, "Late Phases" nos devolvía la sonrisa. A medio camino entre el drama familiar y el terror de licántropos, salí encantado con esta humilde producción yankee que retrata la llegada de un invidente veterano de Vietnam a una urbanización de jubilados sometida a periódicos ataques de algún tipo de fiera. Con el tiempo justo para echar una meadita, "Faults" nos descolocaba con desenlace totalmente "mindfucker". Una pareja de mediana edad contrata a un arruinado -aunque prestigioso en su día- experto en sectas para que rescate a su hija de las redes de unos iluminados. Hasta aquí puedo leer. Seguro que nadie salió indiferente de la sala. La previsión inicial era que nuestro Sitges 2014 terminase aquí, pero las buenas vibraciones nos hicieron prolongar la fiesta con "Filth", la nueva adaptación del hooligan Irvine Welsh, el tipo que escribió "Trainspotting". Los fans de las andanzas de Renton, Sick Boy, Spud y Franco, conectaran inmediatamente con el podrido universo del inspector de la policia de Edimburgo Bruce "Robbo" Robertson. Durante la primera hora de metraje tuve que frotarme los ojos, pues nos estaban proyectando la mejor película de la historia. La media hora restante seguí frotándome los ojos, pero esta vez era para no quedarme dormido. Se termina la fiesta, la trama se torna triste y algo aburrida y el resultado global se resiente. Lástima.
Sábado 11 de octubre
Un intercambio de impresiones con mi viejo cuate Jordi y un semáforo verde en casa facilitaron que el sábado abandonara la cama a las 06:00 de la mañana y me encaminase de nuevo hacia la sede del Carnaval más caliente de Cataluña. A las 08:00 asistimo al primer pase del día de la nueva peli del maestro Joe Dante, "Burying the Ex". El director de "Los Gremlins", "Piraña", "Aullidos" o "El Chip Prodigioso" tiene nuestro respeto eterno y se merece todos los homenajes del mundo, pero chico, su nueva cinta es una completa chorrada. Una comedieta romántica intrascendente con ex-novia zombie por enmedio. Se agradecen las constantes referencias a los clásicos de la Universal y la Hammer, así como la -hoy en día innecesaria- reivindicación de los Ramones, pero "Burying the Ex" es carne de cubeta de videoclub. Si es que todavía queda alguno. Sin movernos del Auditori, llegó el turno de "Sorcerer", clásico olvidado de William Friedkin, el director que arrasó en los 70's con "French Connection" y "El Exorcista". "Sorcerer" es una obra interesante, una potente película de acción de aires Peckinpah ambientada en alguna república bananera. Sin embargo, es rara y anticomercial como ella sola, así que el descalabro de taquilla en su día es totalmente comprensible. Más cuando se estrenó al mismo tiempo que "Star Wars". Por cierto, impagable nuestro Paco Rabal en sus líneas de diálogo en inglés.
En Rock On Magazine se está publicando un completo repaso a lo más granado de lo proyectado en Sitges, con alguna de las reseñas firmadas por un servidor.