Skyfall, volver al origen

Una buena manera de celebrar el medio siglo de la saga del espía más famoso del celuloide. El afamado director Sam Mendes ha sido el encargado de devolver el nivel de mito al 007. Le ha bastado seguir una fórmula casi siempre exitosa: volver al origen del personaje y sus circunstancias. Ha realizado con sorprendente eficacia, una arqueología de la vida, un viaje al pasado y a los fantasmas del  agente James Bond y del ghetto del que forma parte, el MI6 con M, Q y todos los demás.Ha humanizado de tal modo al figurin que sin duda es el arquetipo de lo masculino,  para hacerlo tan real como los miles de fanáticos que hemos seguido una a una, las aventuras del espía al servicio de su majestad.  Daniel Craig tiene en gran parte el mérito al darle al 007 la imagen y la psicología acertadas por primera vez, muy a pesar del hasta ahora insuperable Sean Connery en su composición viril y elegante del primer James Bond.

De izq. a der. Ben Wishaw (Q), Ralph Fiennes (M), Bérénice Marlohe (Sevérine), Daniel Craig (Bond, James Bond), Naomie Harris (Miss Moneypenny), el director Sam Mendes, Judi Dench (former M) y Javier Bardem (Silva)

 La nostalgia con que se nutre el film se matiza con el mundo contemporáneo de las amenazas cibernéticas y la fuerte presencia de los países orientales en la economía mundial. El villano Silva (un escalofriante y vengativo Javier Bardem), personifica el peligro real del aparato tecnológico manipulable y al igual que todos los demás elementos de la película, proviene del pasado, específicamente del oscuro pasado de la imperturbable y siempre eficiente M (Judi Dench).Y así con la maestría de un relojero tanto héroe como villano están al mismo nivel para brindar una batalla en la que las mujeres de nuevo,  entran a adornar el machista mundo bondiano, aunque con ingenio, para no dejar nada suelto, la agente x (Naomie Harris), nace para cerrar el nuevo comienzo de Miss Moneypenny.
El tema musical en esta ocasión recayó en la insuperable voz de Adele. Bella canción casi al nivel de "Tomorrow Never Dies" de Sherryl Crow.
Sam Mendes saltó a la fama con la ácida versión del "american way life" Belleza Americana.