Un mensaje difícil de recordar
Smallfoot, o Pie Pequeño, como la conoceremos en México, intenta dar un giro a la leyenda del Yeti. Migo (Channing Tatum/Sebastián Yatra), un joven miembro de los “Pie Grande”, se encuentra por accidente con un ser humano, algo que pensaba que no existía. Cuando Migo regresa a la aldea Yeti para contar lo que ha visto se crea una conmoción que lleva al pueblo a cuestionar las leyes que la Gran Roca, que custodia Stonekeeper (Common/Santos Alberto). Ahora todos se preguntan qué otras cosas pueden existir más allá de su aldea en las montañas.
La cinta está dirigida por Karey Kirkpatrick y Jason Reisig, de quienes no se puede decir la gran cosa, al menos en su faceta de directores. El guion es obra de Sergio Pablos, Karey Kirkpatrick, Clare Sera, John Requa y Glenn Ficarra, por lo que será a ellos a quien vamos a cargar la responsabilidad del éxito o fracaso de la cinta. Los guionistas apostaron a la irreverencia de los niños, sí, es cierto que la historia tiene mensajes importantes que tienen que ver con que no existen verdades incuestionables, pero para llevar a los niños a un tema tan serio, echaron mano de algunos chistes de doble sentido y gran cantidad de gags muy al estilo de Despicable Me (Mi villano favorito), del que Sergio Pablos es creador de la historia. En la música tenemos a Heitor Pereira, también egresado de la saga Minnions, pero en esta ocasión sus canciones tienen un tipo religioso que no logra enganchar al público con la tonada, ni siquiera la voz de Niall Horan logrará que las niñas salgan tarareando la canción. El elenco para la versión original puede representar el éxito en taquilla de Estados Unidos. Destaca la presencia de Channing Tatum, Zendaya,LeBron James, Gina Rodriguez, Danny DeVito y el comediante James Corden, quien tiene a bien cometer peor sacrilegio que el que hiciera Vanilla Ice con la canción Under Pressure a principios de los años noventa. Para la versión en español tendremos en el doblaje a: Sebastián Yatra, Sandra Domínguez y Jorge Ugalde, entre otros. Lo que sí merece un aplauso en la película, es el trabajo de animación para tanto personaje tan peludo. Tiene excelentes gráficos, aunados a una belleza colorida que contrasta con el blanco de la nieve en el Himalaya.
Pie Pequeño, no tiene un villano definido, no existe el bien y el mal, sino una cuestión de enfoques, percepciones o problemas de comunicación, lo cual no deja ser positivo para la cinta y para las tendencias de la época; sin embargo, será una lección difícil de recordar. Para mí se queda como una película linda con un gran mensaje, espero que los más pequeños sean capaces de entenderlo, porque el factor “pastelazo” les roba mucho la atención, aunque sin duda los divierte.