Windows Live Writer no me deja poner vídeos, así que haced click en la imagen.
Desde el primer momento en que conocí la existencia de esta serie sabía que tarde o temprano tendría que verla, ¡con lo que me gustan los musicales! Cuando la serie se estrenó incluso os hablé de ella en esta entrada, sin embargo, no la he podido ver hasta este verano cuando vi la dos temporadas que la conforman.
Director: Theresa Rebeck (Creator), Michael Mayer | Guión: Theresa Rebeck | Música: Marc Shaiman |Fotografía: Shelly Johnson | Reparto: Katharine McPhee, Megan Hilty, Debra Messsing, Christian Borle, Jack Devenport, Anjelica Huston | Productora: Dreamworks Television – Storyline Entertainment – Universal Media Studios.
La pareja creativa Tom y Julia comienzan a trabajar en un nuevo musical para Broadway basado en la vida de Marilyn Monroe. La productora Eileen Rand se entera del proyecto y decide unirse junto al director Derek Wills, cuyo talento es comparable con su egocentrismo. Buscan hacer el mejor musical sobre Marilyn. Para ello deberán buscar a la candidata perfecta y no lo tendrán nada claro entre una joven e ilusionada debutante, Karen, y una veterana actriz cansada de ser siempre la segunda, Ivy. A medida que la producción avanza, los involucrados deberán lidiar con sus caóticas vidas, así como con todo lo que demanda la vida en el teatro.
Cuando cualquiera va a ver un obra de teatro, un musical, lo único que hace es sentarse en la butaca y dejarse llevar por la magia del espectáculo, donde un grupo de personas trabajan sin descanso para que lo disfrute como nunca. Y todo comienza con un pequeña idea que va creciendo, uniéndose gente, creando un libreto musical, un guión, unas coreografías y ensayar, ensayar y ensayar hasta saber que han contentado al público. Hasta que no vi Smash no me planteé el durísimo trabajo que hay detrás de un musical, los engaños, las traiciones, el duro esfuerzo que todos tienen que hacer para que la obra tenga la oportunidad de ser vista. De eso trata, de creer en algo y luchar contra todos aquellos que creen que va a ser un completo fracaso, de luchar por tener tu oportunidad y que se te reconozca tu talento y tu trabajo, de cómo perjudica en tus relaciones, en tu vida diaria, o te satisface como ningún otro proyecto lo ha hecho antes. Ahora cuenta acuda a uno, lo miraré con otros ojos.
Pero también trata de Marilyn Monroe, al menos la primera temporada; es poco lo que se nos muestra de ella a partir de los números musicales y de la manera que quieren enfocar el musical, pero intentan mostrar diferentes caras de ellas, no la sexy, no la bonita, sino la real. Es algo que me ha gustado mucho y que me ha abierto esa curiosidad por saber más sobre su vida. En la segunda temporada, también siguen con el musical de Marilyn pero abren la trama a otros hilos argumentales sobre el teatro musical, es decir, muestran lo que es crear una obra con un presupuesto mucho más bajo que con el otro.
La creación del musical, paso a paso, desde el día que Julia y Tom dijeron ¿y por qué no crear un musical sobre Marilyn Monroe?, los increíbles números musicales, las canciones, toda esa parte me ha gustado mucho; sin embargo, ha llegado el momento de explicar lo que no me ha gustado de Smash. Tenía todos los puntos para convertirse en gran serie, en una de esas que me encantan y que veo una y otra vez, que la recuerdo con cariño. Pero la realidad no ha sido esa ya que mi gran problema ha sido con los personajes. Mientras que con algunos sí que he simpatizado (un poco) y me parecía interesante seguir sus vidas, sus relaciones con amigos, parejas, familia y el teatro, con otros no he podido. Ha habido unos cuantos que me han parecido muy egoístas y que cometían errores con una facilidad que me superaba. Esto no es malo sí ha habido otros que sí que me han fascinado, pero no ha sido el caso, ni en la primera ni en la segunda temporada. A veces me daba la sensación que la serie obligaba a posicionarte al lado de una de las candidatas a Marilyn, y eso me molestaba porque al fin y al cabo sólo eran dos chicas intentando cumplir su sueño. ¿Quién no haría cualquier cosa por hacerlos realidad? En cuanto a los actores que los interpretan, en general no tengo ninguna queja, pueden gustarte unos más que otros, pero hay que reconocer que se mueven y cantan de una manera increíble. Destaco a Jack Devenport porque lo había visto en Flashforward y en aquel momento ni fu ni fa, pero es en Smash me ha gustado mucho el papel que hacía, el típico arrogante pero con los pies en la tierra.
En la primavera pasada, se anunció que se cancelaría pero que, afortunadamente, tendría un final cerrado. Así es, los personajes ven como sus objetivos se acaban cumpliendo o cómo encuentran esa estabilidad en su vida que se veía venir que necesitaban a principios de la serie. Sinceramente, me dio pena porque la parte musical es de diez, pero entiendo que finalmente haya sido cancelada. En cualquier caso, si os gustan los musicales y Marilyn Monroe es una serie de obligado visionado.