Los noruegos de Snøhetta, en colaboración con el estudio francés SRA, son los encargados de diseñar la nueva sede del grupo de comunciación Le Monde en París.
El proyecto está estructurado en dos partes: el edificio de oficinas con forma de puente, y el espacio que se genera bajo la parte elevada del volumen, destinado a una plaza pública.
La piel exterior acristalada reproduce un estampado pixelado con diferentes grados de transparencia, translucidez y opacidad. El diseño busca que los espectadores perciban una fachada homogénea desde la distancia, revelándose un mayor nivel de complejidad de la misma según se aproximan.