Revista Deportes
Por José Daniel Rojo
Los acontecimientos se están desarrollando tal cual preveíamos. Era fácil predecir que la elaboración de los carteles de la Feria de Málaga iba a resultar todo un fiasco porque conocíamos de la incapacidad para gestionar de la empresa comandada por Fernando Puche. Lo más penoso de todo es que ellos mismos, la empresa, han dejado ver las malas relaciones, nulas diría yo, existentes entre ellos. Unos afirman que todo esto es una campaña contra Puche, una guerra en la que podría estar participando algún componente de la actual gestora del coso con el único deseo de coronarse nuevo empresario de La Malagueta. Sea como fuere el aficionado acaba pagando, una vez más, las nefastas consecuencias de todo esto.
Cuando se trata de centrar un abono en un torero, pongamos por nombre José Tomás, se arriesga uno a ganar o perder. En definitiva un negocio como otro cualquiera. Ganas si Tomás forma parte de un cartel y gracias a él consigues vender toda la feria, pero pierdes también si JT decide no venir y se van todos los planes al desolladero. En este caso hay que andar como locos buscando toreros para dos tardes para intentar sacar un abono con los máximos alicientes posibles para defender el “garito”.
Sinceramente no sé si José Tomás quiere tanto a Málaga como se dice. Desde siempre han tratado de vendernos que Málaga es una plaza muy especial para el torero y no sabía yo si esos sentimientos eran reales o no, Dios me salve de meterme yo ahora a valorar cuestiones sentimentales, pero siempre he tenido mis dudas sobre si toda esa campaña de enamoramiento por Málaga era fruto también del trabajo de marketing del torero madrileño. Me explico: en Resurrección nos decían “José Tomás no va a Sevilla y viene a Málaga porque ésta es una plaza muy importante para él”. ¡¡Y un carajo!! José Tomás venía a Málaga porque no había habido acuerdo “económico” para ir a Sevilla. De esta manera se vendía al público malagueño una imagen no correspondida con la realidad y claro, ahora empezamos a pagar las consecuencias. Si no viene José Tomás parece que no tenemos feria. Es lo que ocurre cuanto tratamos de centrar la Fiesta Nacional en un solo torero, cuando queremos que la Tauromaquia gire en torno a una sola figura.
Respecto a los comunicados que en estos días han salido a la luz por parte de la empresa y el apoderado Salvador Boix no se qué pensar. Me extraña que la excusa por parte del torero sea que han tenido informaciones sobre que la empresa ha vendido las entradas para ver a José Tomas en un pack. Mire Usted Sr. Boix, eso no son rumores, eso es una realidad, triste realidad, pero me extraña que usted salga con esto ahora cuando permitió los ”mini-abonos “ en Semana Santa de años anteriores. Fuimos muchos los aficionados que recriminamos esa actitud a la empresa en su debido tiempo y su justificación sería digna de elogio por los aficionados si hubiese sido capaz de mantenerla en el tiempo. Solo se trataba de haber sido fiel a sus exigencias.
Creo, sinceramente, que se equivoca Tomás y su entorno con las condiciones que imponen. No seré yo quien discuta si merecidas o no, porque el torero lo avala en el ruedo, pero no se puede poner a los empresarios entre la espada y la pared. No se puede vetar a tantos ganaderos. No se puede exigir ir siempre entre dos toreros impuestos por ellos. Y si me apuran, no se puede considerar figura del toreo a quien hace temporada en plazas a medida mientras hay otro grupo de toreros que dan la cara a lo largo de toda la temporada, en todas las plazas y con no tantas exigencias en los despachos. Sr. Tomás, ¿le suenan a usted de algo Sevilla, Madrid, Pamplona o Bilbao? Se juega con ventajas y las grandes figuras de la historia de la Tauromaquia nunca jugaron nunca así. Se dice que el público manda y pone a cada uno en su sitio, sí, cierto, pero no debemos olvidar que el público también se equivoca.
Y en lo que respecta a Fernando Puche, pues difícil papeleta la que tiene el hombre. Se queja de que Javier Conde todavía no le ha presentado los carteles y la afición, mientras tanto, se pregunta ¿pero esto no es un trabajo de equipo? ¡¡Pobres ilusos!! El equipo está dañado internamente. Hay grietas por todos lados y la prueba de ello la tendremos cuando La Malagueta salga de nuevo a concurso y veamos cómo cada miembro de los que componen ahora la UTE Fernando Puche, presente oferta por separado.