¿No tienes agenda? ¡Hazte con una! También puede serte de utilidad una simple libreta, mira qué bonitas y baratitas son éstas de abajo. Su función es almacenar todas tus responsabilidades y distribuirlas de forma sana y realista: no infles demasiado los días, si acabas antes de lo previsto, puedes adelantar las próximas tareas, pero si, por el contrario, llenas las páginas de obligaciones y no las cumples, te deprimirás.
Imágenes de El Corte Inglés. Rosa, rojo, verde, amarillo
El cuerpo acumula mucha tensión. Si no prestas atención a su estado, no es raro que en algún momento te falle, así que mete en tu planificación algunos momentos de ejercicio. No es necesario que dediques una hora diaria en el gimnasio, con que salgas a andar por tu barrio una media hora es suficiente. La idea es descargarte y desconectar de las responsabilidades durante unos minutos. Tu cuerpo te lo agradecerá.
Hablar con los apuntes, discutir por teléfono con el jefe o confeccionar un trabajo de cuarenta páginas puede enloquecer a cualquiera. No te encierres en ti mismo/a y permítete salir de vez en cuando con tus amigos o tu pareja. Al igual que el ejercicio, estas salidas son un descanso. Sólo unos apuntes más:
1• ¡El chat de Facebook o el whatsapp no cuentan como socialización! Sal a que te dé el aire y habla con personas de carne y hueso.2• Las fuentes del estrés son temas prohibidos de conversación. Si necesitas desahogarte un poco, puedes hacerlo, pero no conviertas tu salida de desconexión en una conferencia sobre aquello que tanto te agobia. Si lo haces, cuando vuelvas al trabajo no te notarás tan renovado/a.3• Las salidas son ocasionales, es decir, no quedes a la mínima de cambio porque las tareas no se cumplen solas.
Si eres una persona creativa e hiperactiva, seguramente te vengan a la cabeza ideas durante esta época. No sólo eso, sino que si alguien te propone un proyecto desearás decirle que sí a todo. Pero vamos a ver, ¿no ves que las veinticuatro horas te quedan cortas? Ten paciencia, espera a que pase la época difícil para plantear comprometerte con otras cosas. Puedes apuntar todo lo que se te ocurra en tu agenda/libreta.
Un premio puede ser la mejor motivación para no perder la cordura. Una escapada a una ciudad cercana, una sesión en un spa, un abrigo que cuesta un poco más de la cuenta... Como suele decirse, después de la tormenta, siempre llega la calma, ¿y qué mejor que celebrarlo?
Espero que os hayan sido de utilidad estos pequeños tips, a mí me han ayudado a desconectar un rato. Os quería comentar que no sé si el vídeo de esta semana llegará el viernes o el sábado, porque, como he contado estoy un poquito estresada. De todas formas, sino lo publico el viernes con el post correspondiente, el sábado prepararé uno extra para que os enteréis de que el nuevo vídeo ya está listo ;)
♦ ¿Cuáles son vuestros periodos de estrés más temidos? ¿Cómo sobrevivís a ellos? ♦