Sí, es Coco
(Socorro sólo le dicen sus papás cuando están de malas)
Juana Inés Dehesa nos entrega en Socorro (pero me dicen coco) de una diseñadora de modas originaria de Querétaro que llega a la ciudad de México con esperanza de triunfar en su carrera profesional. Coco se encuentra en los clásicos conflictos de una educación tradicional provinciana y lo que ella realmente quiere hacer. Le cuesta opinar y tomar decisiones radicales, y al final termina haciéndolo sólo a medias. Está comprometida después de años de noviazgo y teme que su futuro esposo, una vez casados, trunque su éxito profesional. ¿Suena familiar?
De manera ágil y sobre todo muy divertida, Juana Inés Dehesa describe la vida de Coco y nos divierte en cada capítulo con anécdotas que son familiares porque nos han pasado alguna vez.
Y sobre todo demuestra el conflicto en que viven las mujeres de la actualidad, entre una educación tradicional y la revolución feminista; entre hacer lo que se espera de una y saltarse a la familia, los amigos y la suegra para hacer lo que realmente se desea sin importar nada más. Pero ¿es posible hallar el equilibrio entre la carrera, el amor y la familia? Eso intenta responder Socorro (pero me dicen Coco).
Socorro (pero me dicen Coco)
Fragmento:
"No tengo voluntad. Soy, básicamente, un mueble que no puede tomar una decisión y apegarse a ella: una especie de autómata sin conciencia. En lugar de hacer lo que dije que iba a hacer, de ser súper discreta y no decir nada a menos que saliera a la conversación o me preguntaran directamente, lo de Ana me desató. Después de contarle hasta el último segundo del sábado, y de que ella me dijera que, para ser Alfredo, todo le parecía súper romántico, caminamos a la oficina y me acabo de pasar una hora yendo de escritorio en escritorio con puras excusas de lo más chafas y aprovechando cualquier oportunidad para exhibir mi mano izquierda. Es como de cuento de terror; como si en el diamante viviera un genio maligno que se apoderó de mi cordura. O sea, ¿qué onda conmigo?"
Sobre la autora:
El problema empezó cuando Juana Inés Dehesa (ciudad de México, 1977) leyó Mujercitas. Ahí decidió que lo suyo no eran las niñas bien peinadas y que se sientan a esperar a que la vida decida por ellas, sino las heroínas respondonas y arrojadas, las que, aunque se hacen un poco de bolas, al final terminan por resolver su vida y su destino. Venturosamente, ha vivido rodeada de ellas, tanto en los libros como en la vida, y nunca han dejado de maravillarla e inspirarla. Por eso, ha escrito novelas como Pink Doll y Rebel Doll (en Ediciones B), Alicia, la piñata y una serie de problemas (en SM), y, en editorial Océano, el ensayo Treintona, soltera y fantástica. Además de contar historias, es columnista en el diario Reforma y jefa de información en Radio UNAM.
Deja tu comentario
comentarios