Soliloquios fugaces
Soliloquio nº5. (Otra vez registros)
"01:35. HDME. SVP, VP, apos limp, se adm. tto, no depos, mñana @. A dormido toda la noche."
¡Cuántas veces hemos leído notas como éstas! ¡En cuántas ocasiones hasta las habremos escrito nosotros mismos! Y,seguramente, nunca nos hemos parado a pensar si son correctas, ortográfica y gramaticalmente, si ofrecen información importante, única, veraz, si son entendibles, si ayudan a la consecución de los objetivos previamente establecidos, si se enmarcan dentrode los requisitos legales exigidos, si evidenciamos con ellas nuestros conocimientos y nuestra profesionalidad, etc Cada vez que, revisando registros, me topo con anotaciones como la precedente me vienen a la cabeza dos leyendas sumerias, leyendas que provienen del lugar de origen de la escritura:- la primera de ellas se refiere a Enmerkar (siglo III aC) rey de Uruk, ciudad donde se descubren, en forma de tablillas de arcilla, los primeros libros y uno de los posibles orígenes de surgimiento de la escritura. Según la leyenda, Enmerkar fue condendo a beber agua putrefacta en el infierno como consecuencia de no haber dejado por escrito todas sus hazañas;
- la segunda, atribuída también a Enmerkar, cuenta que éste se vió obligado a inventar la escritura ya que el mejor de sus emisarios, al realizar un largo viaje para convencer a un adversario y a consecuencia del cansancio que le produjo, al llegar a su destino no pudo hablar y transmitir el mensaje de su rey. Debido a ello, se tomó la decisión de enviar los mensajes escritos. Otros escritos relatan que fue el adversario quién se excusó ante el emisario, diciéndole que no entendía sumerio y presentando como excusa el episodio de la Torre de Babel y la guerra de lenguas. Dicen que finalmente el adversario sucumbió a las exigencias del rey de Uruk, puesto que el emisario regresó, esta vez con tablillas de arcilla escritas en lengua cuneiforme... sin poder poner excusas de no comprensión.
Dice Vergílio Ferreira, novelista, ensayista y profesor, (1916-1996) en su libro "Pensar":
"No se puede pensar, fuera de las posibilidades de la lengua en que se piensa (...) cambiar de lengua es ya cambiar de pensar o cambiar la tonalidad de ese pensar".Si esto es así, ante anotaciones como la del título, ¿qué ocurre cuándo alguien utiliza la lengua en ese sentido? No cambia de pensar o de tonalidad de pensar, sino que la lengua que utiliza es sometida a un empobrecimiento tal que es imposible adjudicarle un pensar. Perveritir la propia lengua es pervertir el propio pensamiento, es hacerlo irreflexivo, incoherente, im-pensable, absurdo.
"El lenguaje es necesario al pensamiento. Le permite cobrar conciencia de sí mismo", dice Pedro Salinas. "El pensamiento hace al lenguaje y al mismo tiempo se hace por medio del lenguaje (...) El pensamiento se orienta hacia el lenguaje como el instrumento universal de la inteligencia".
Me duele decir lo que viene a continuación..: ante esta utilización del lenguaje, ¿hemos perdido el instrumento que nos hace ser inteligentes y que nos constituye como disciplina científico-humanística? ¿Hemos dejado de pensar, de ser?
Volviendo a Vergilio Ferreira, encontramos:
"Algunas faltas de ortografía son extremadamente elocuentes. Porque, como las uñas sucias, pueden ser una pista inmediata de estupidez".Y de nuevo nos abofetea la frase entrecomillada del título. Estupidez = torpeza y lentitud notable en comprender las cosas. ¿En qué nos estamos convirtiendo? Y seguramente se oirá de fondo, "¡pues no es para tanto!". ¿Realmente alguien puede pensar que la frase incial "no es para tanto"? ¿Estamos tan alienados que no somos capaces de ver nuestros propios errores? ¡No, por favor! No volvamos a esgrimir como excusa la falta de tiempo, ¡ya dije lo qué pensaba respecto a eso!
Y lo peor de todo es que no sé cómo lograr transmitir la evidencia de lo evidente. Podemos catalogar los registros formalmente, metodológicamente, podemos repetir hasta la saciedad en qué se diferencian, dónde usar un registro narrativo y dónde un registro estructurado, estandarizado, en qué momento utilizarlos, cómo ajustar apropiadamente el lenguaje, podemos ejemplificar con registros in situ, podemos reflexionar sobre lo ya hecho, evidenciar errores y aciertos, hacer uso de estrategias formativas atractivas...y así hasta agotar todas las posibilidades de transmisión. Pero ¿realmente creemos en ellos, creemos en su utilidad? Esta es la piedra angular, nuestra piedra filosofal capaz de convertir lo invisible en visible, de hacernos patentes, incuestionables, palpables, indiscutibles para nosotros mismos y para los demás.
"Escribir bien. Ser sensible a lo que se quiere revelar y ser apenas su revelación. Y que el mundo exista porqué él* lo ha revelado. Y eso es todo."
V. Ferreira* Quien escribe.