Revista Viajes

“Soltar, ¿qué es lo que tengo que soltar?” por Natalia S. Castrege

Por Naticastrege

CuÁntas veces escuchamos, escribimos o nos dijimos a nosotros mismos: “HAY QUE SOLTAR”, “DEJAR IR”, “dejar QUE FLUYA”, pero casi como conceptos de moda, parece que quedan en un plano superficial y que suponen acciones extremadamente sencillas y fáciles de llevar a cabo, aunque no lo sean para nada.
ahora, sinceramente, te pregunto: ¿vos sabés lo que tenés que soltar?.

La mayoría de las veces no sabemos de qué hablamos cuando hablamos de SOLTAR, nos pasa a todos. ¿Hay que soltar una idea?, ¿alguna cosa material?, ¿una obsesión?, ¿debería soltar un deseo o varios?, ¿hay que soltar una relación o dejarla fluir?, ¿hay que abrirse a nuevas opiniones?, ¿soltar es como saltar al vacío?, ¿estoy juzgando a alguien porque no es como yo?, ¿guardo rencor?, ¿estoy demasiado apurado en ver resultados como para dejarlos fluir?, ¿no quiero perder nada?, ¿tendré miedo de soltar?.

A grandes rasgos podríamos empezar pensando (por favor pensemos juntos) que podríamos soltar aquello a lo que nos aferramos, pero, ¿está mal aferrarse? o ¿hay que soltar las cosas malas a las cuales nos aferramos?, o en un sentido más amplio, ¿deberíamos soltar todo aquello a lo que nos aferramos?. Pero… ¿tengo que soltarlo todo, un poco, o con algo alcanza?.

Cuando algo va mal, o no nos hace felices y estamos aferrados, convivimos a diario con ese sufrimiento, lo padecemos como una carga pesada que nos agobia y nos estresa, pero a la vez, muchas veces no lo sabemos, no somos conscientes o no podemos desprendernos tan fácilmente de eso que nos está dañando. Puede ser alguna situación que está trabada, no camina, no crece, no es sana, no nos deja ser libres o nos ata en algún sentido, no FLUYE y eso… se siente.

“El apego es la causa del sufrimiento” Buda.

Pensar en opuestos

El opuesto de soltar es AFERRAR o RETENER, el de fluir es ESTANCAR, OBSTRUIR, DETENER.
Vamos a ver las definiciones básicas de estos conceptos:

AFERRAR: Agarrar con mucha fuerza / Insistir con tenacidad en algún dictamen u opinión. RETENER: Conservar, guardar en si / No dejar que algo se vaya / Arrestar.
ESTANCAR: Detener y parar el curso y corriente de un fluido / Suspender.
OBSTRUIR: Estorbar el paso, cerrar un conducto o camino / Impedir la realización de una acción o desarrollo de un proceso.
DETENER: Parar una cosa, impedir que siga su movimiento / Impedir el desarrollo de una acción. “Soltar, ¿qué es lo que tengo que soltar?” por Natalia S. Castrege  

Si pensamos en un proceso natural, como el río siguiendo su curso, o una planta creciendo y dando sus frutos, es decir que algo se de sin forzarlo, que el tiempo lo madure, que ocurra tal como tiene que ocurrir, y lo comparamos con alguna situación (que pienses en este momento) a la que sientas que te estás aferrando, podríamos preguntarnos:

¿Es natural que no dejemos que se vaya algo o alguien que quiere irse o que tiene que irse?, ¿es natural que siga aferrado a alguien que ya se fue?, ¿es natural que me aferre a alguien porque no puedo perdonarlo?, ¿es natural que estorbemos nuestro paso o el de los demás?, ¿es natural que entorpezcamos algo que va a darse de todas formas?, ¿es natural que impidamos que se desarrolle un proceso que aún le falta madurar, o que lo apuremos impidiéndole que crezca como debe crecer?.

La naturaleza es muy sabia, por eso debemos observarla para observarnos.

Por supuesto SOLTAR no es tan sencillo porque a lo que nos aferramos, muchas veces, son mecanismos muy profundos y duraderos, otras veces mecanismos o hábitos imperceptibles, que hasta podemos negarlos, evitarlos o no reconocerlos.
A algunos nos lleva años de terapia resolver algo de esto, para algunos significará un cambio drástico en su vida, un volver a empezar, mucha más consciencia del momento presente, otros tal vez nunca sepan qué es lo que tienen que soltar o qué significa soltar.

DESAPEGO: UN CAMINO HACIA LA LIBERTAD

Al DESAPEGO mucha gente lo conecta con desinterés, indiferencia, frialdad, distanciamiento, pero lejos de eso, es un concepto amplio que vale la pena poner en práctica.“Soltar, ¿qué es lo que tengo que soltar?” por Natalia S. Castrege
Desapegarse es liberarse, es lograr un equilibrio y poder generar vínculos sanos, basados en la confianza y el respeto, tener autonomía y ser responsables de nuestras vidas, de nuestras acciones, ser y dejar ser, proteger y amar.
Desapegarse no es atar, no es depender, no es necesitar, no es aferrar, no es retener, no es dominar, no es encarcelar, no es etiquetar, no es reprimir, no es ser egoista. 

 “Cuando dejo ir lo que soy, me convierto en lo que podría ser. Cuando dejo ir lo que tengo, recibo lo que necesito” Lao Tze 

Cuentan que un turista americano fue a la ciudad de El Cairo, Egipto, con la finalidad de visitar a un famoso sabio.
El turista se sorprendió al ver que el sabio vivía en un cuartito muy simple y lleno de libros. Las únicas piezas de mobiliario eran una cama, una mesa y un banco.
-¿Dónde están sus muebles? preguntó el turista.
Y el sabio, rápidamente, también preguntó: -¿Y dónde están los suyos…?
– ¿Los míos?, se sorprendió el turista. ¡Pero si yo estoy aquí solamente de paso!
– Yo también… concluyó el sabio.

 ALGUNAS ACCIONES QUE NOS AYUDAN A SOLTAR

PERDONAR
NO JUZGAR
NO DEPENDER DE COSAS MATERIALES PARA SENTIRNOS BIEN
SER SINCERO CON UNO MISMO
“SER” , MÁS QUE COMPORTARME COMO ME GUSTARÍA SER, SIN SERLO
ACEPTARSE TAL CUAL UNO ES, CON VIRTUDES Y DEFECTOS
TOMAR CONSCIENCIA DE LA REALIDAD
PODER VER LA REALIDAD DESDE DIFERENTES ÓPTICAS
APRENDER A ESCUCHAR A TODOS
RESPIRAR
ACEPTAR A TODOS
VIAJAR (durante un largo tiempo) 

 LOS DEJO IR

Por último también pensar en el SOLTAR como un proceso que debe aprenderse, y que lleva un tiempo de comprensión, para cada uno distinto y único.
No alcanza con soltar por fuera, si no SOLTAMOS los hilos internos que nos atan.
El cambio es siempre desde adentro hacia afuera y no hay fórmulas mágicas, ni actitudes positivas que nos salven si por dentro seguimos atados.
Pero, para empezar por lo menos, podés preguntarte: ¿QUÉ TENDRÍA QUE SOLTAR PARA SER VERDADERAMENTE FELIZ?.
Los dejo con un fragmento del clásico libro “El principito” que habla del apego y del verdadero amor.
Al final les dejo el link para leer todo el libro.
Personalmente me encanta releerlo, siempre tiene respuestas nuevas para mi.

-“Te amo” – dijo el principito…
-“Yo también te quiero” – dijo la rosa.
-“No es lo mismo” – respondió él…
“Querer es tomar posesión de algo, de alguien. Es buscar en los demás eso que llena las expectativas personales de afecto, de compañía…
Querer es hacer nuestro lo que no nos pertenece, es adueñarnos o desear algo para completarnos, porque en algún punto nos reconocemos carentes.

Querer es esperar, es apegarse a las cosas y a las personas desde nuestras necesidades. Entonces, cuando no tenemos reciprocidad hay sufrimiento.
Cuando el “bien” querido no nos corresponde, nos sentimos frustrados y decepcionados.
Si quiero a alguien, tengo expectativas, espero algo. Si la otra persona no me da lo que espero, sufro.
El problema es que hay una mayor probabilidad de que la otra persona tenga otras motivaciones, pues todos somos muy diferentes.
Cada ser humano es un universo.
Amar es desear lo mejor para el otro, aún cuando tenga motivaciones muy distintas. Amar es permitir que seas feliz, aún cuando tu camino sea diferente al mío. 
Es un sentimiento desinteresado que nace en un donarse, es darse por completo desde el corazón. Por esto, el amor nunca será causa de sufrimiento.
Cuando una persona dice que ha sufrido por amor, en realidad ha sufrido por querer, no por amar.Se sufre por apegos. Si realmente se ama, no se puede sufrir, pues nada se ha esperado del otro. Cuando amamos nos entregamos sin pedir nada a cambio, por el simple y puro placer de dar. Pero es cierto también que esta entrega, este darse, desinteresado, sólo se da en el conocimiento.
Sólo podemos amar lo que conocemos, porque amar implica tirarse al vacío, confiar la vida y el alma. Y el alma no se indemniza.
Y conocerse es justamente saber de vos, de tus alegrías, de tu paz, pero también de tus enojos, de tus luchas, de tu error.
Porque el amor trasciende el enojo, la lucha, el error y no es sólo para momentos de alegría. Amar es la confianza plena de que pase lo que pase vas a estar, no porque me debas nada, no con posesión egoísta, sino estar, en silenciosa compañía.
Amar es saber que no te cambia el tiempo, ni las tempestades, ni mis inviernos. Amar es darte un lugar en mi corazón para que te quedes como padre, madre, hermano, hijo, amigo y saber que en el tuyo hay un lugar para mí. Dar amor no agota el amor, por el contrario, lo aumenta. La manera de devolver tanto amor, es abrir el corazón y dejarse amar”.

 -“Ya entendí” – dijo la rosa. 
– “No lo entiendas, vívelo” -dijo el principito. 

Buena semana, Nati 

Consultas web:
– Word reference
– “El principito” de Antoine de Saint Exupéry (completo) 


Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revista