Revista Comunicación
“APRECIADO FELIFE: Soy Carolina, médico de MSF. Te escribo desde Liben, en Etiopía, cerca de la frontera con Somalia, para explicarte que la crisis que están sufriendo ahora mismo los somalíes no es como las de otros años. Es mucho peor. Por eso necesitamos urgentemente tu ayuda. Los cuatro campos de refugiados de la zona en que me encuentro están abarrotados. Los riesgos de epidemias son evidentes. Y el flujo de refugiados no se detiene.” Así comienza la conmovedora carta que la doctora Carolina Nanclares ha enviado a los socios de Médicos Sin Fronteras (MSF) para alertarnos sobre la crítica situación que se registra en el llamado Cuerno de África y, singularmente, en Somalia. “Es la peor crisis humanitaria de los últimos 60 años, peor que la sufrida en los ochenta en Etiopía y en los noventa en la propia Somalia”, insisten también desde Cruz Roja España. En Somalia, tras 20 años de un conflicto armado que ha asolado el país, sólo hay cuarenta médicos para atender a 10 millones de habitantes. Para colmo de males, hace meses que no llueve, las cosechas se han perdido, el ganado ha muerto y la población no tiene con qué alimentarse. Algún dato más. Cada hora 1.000 personas mueren en el mundo por falta de alimentos. Algo falla cuando, como se ha repetido estos días, el 15% de la humanidad sufre hambre crónica, debido sobre todo al aumento del precio de los alimentos, mientras el 20% tiene sobrepeso. En Somalia, al menos el 20% de los hogares se enfrentan a una grave escasez de alimentos, el 30% de la población está en un estado de desnutrición grave con una tasa de mortalidad diaria de 2 por cada 10.000 personas.No hacen falta más comentarios. No es hora de palabras, sino de actuar. Por muy preocupados que estemos por el derrumbe de las Bolsas, o por la crisis del euro. Con un donativo de 60 euros, MSF puede suministrar 242 raciones de alimento nutricional terapéutico para tratar la desnutrición No basta con lamentarse. Hay muchas formas de ayudar. Si no sabes cómo hacerlo, pincha aquí.