Sentimientos encontrados en el nuevo trabajo de Foo Fighters. Y no porque no sea un buen disco, que lo es, pero quizás toda la expectación creada alrededor del lanzamiento ha jugado una mala pasada en la recepción del mismo.
Partiendo de la base, cuando menos experimental, de querer evocar a través de las canciones del disco las sensaciones que ocho estudios norteamericanos (Chicago, Austin, Nashville, Los Ángeles, Seattle, Nueva Orleans, Washington D.C. y Nueva York), han influenciado en la formación – todo ello documentado además con una serie paralela de la HBO-, el resultado se esperaba cuando menos novedoso. Y no ha sido así.
Superada esta pequeña decepción, uno piensa en sumergirse en la inmediatez y contundencia que los Foo Fighters siempre han hecho gala en sus trabajos, pero “Sonic Highways” es todo lo contrario. Resulta demasiado plano y denso a priori.
No obstante y a pesar de esta primera impresión de letargo, el disco empieza a despertar escucha tras escucha, y de una forma ponderada si se contextualiza a la par que la serie, entendiendo el porqué de la canción en cada uno de los estudios. Aunque lejos de lo que venían haciendo últimamente desde luego. Así que mejor no compararlo con el magnífico “Wasting Light” (2012).
“Sonic Highways” no es el mejor disco de los Foo Fighters, pero tampoco es un disco para no tener en cuenta. En su esencia siguen estando los cambios de ritmo y la épica que les ha hecho grande. Aunque esta vez cueste más de la cuenta sacarles brillo.
- Calificación: 7,5 / 10
- Canciones Destacadas: ‘Something From Nothing’, ‘The Feast And The Famine’.
- Te gustará si te gusta: te gustan Foo Fighters y no te importa que metan tanto relleno en sus últimos discos