El consejero delegado de Sony, Howard Stringer, se enfrentó a las críticas contra su gestión después de que el gigante electrónico revelara que unos piratas informáticos podrían haber robado los datos de otras 25 millones de cuentas en una segunda violación masiva de seguridad. Sony reveló el incidente sólo un día después de que la firma anunciara que estableció medidas para evitar otro ciberataque como el que sufrió su red PlayStation, esperando reparar su imagen empañada y tranquilizar a los clientes que podrían estar pensando cambiarse a Xbox de Microsoft.
El gigante japonés de artículos electrónicos dijo que su red de juegos online para ordenadores Sony Online Entertainment sufrió una brecha de seguridad el 18 de abril, pero que no se enteró hasta las primeras horas del lunes y posteriormente cerró el servicio.
El ataque podría haber conducido al robo de 10.700 registros directos de débito de clientes en Austria, Alemania, Holanda y España y 12.700 números de tarjetas de crédito o débito fuera de Estados Unidos, agregó.