¿Qué tal la semana? ¿Se ha notado el día festivo? Yo al menos sí, y mucho. No sé si vosotros tenéis planes fijos para Halloween o no, comentadme. A mí me encanta disfrazarme, sobre todo ponerme lentillas blancas que dan mal rollo :) No es una tradición como tal, pero siempre suelo ver en estas fechas Pesadilla antes de Navidad o La novia Cadáver, ¡seguro que este finde en un ratillo caen! Y vosotros, ¿os habéis disfrazado? ¿Veis este estilo de películas? Os traigo una reseña muy poco acorde al tema de Halloween... pero había que publicarla ya. ¡Dentro reseña!
Título: Sophie en los cielos de París
Autor: Katherine Rundell
Género: Middle-grade
Editorial: Salamandra
Boolino
Sinopsis:
Cuando tenia apenas un año, Sophie apareció flotando en el mar dentro del estuche de un violonchelo y se llegó a la conclusión de que era huérfana. Años mas tarde, Sophie insiste en que recuerda vagamente a su madre pidiendo socorro tras el naufragio y con la Agencia de Protección de Menores pisándole los talones huye a París en busca de la madre ausente con una única pista: la dirección que hay grabada en el estuche del violonchelo. En Paris, Sophie conocerá a Matteo y sus amigos, unos vagabundos que recorren la ciudad por los tejados, que al poco tiempo se prestaran a ayudarla en la difícil búsqueda.
Cuando recibí este libro no tenía ni idea de qué trataba, ya que era una galerada y no tenía ni sinopsis. (Sí, suelo guiarme mucho por ésta). Se nos presenta a una niña huérfana, Sophie que es acogida por Charles un hombre fuera de lo común, inteligente y extravagante. Este hombre la quiere tal y cómo es y lo que puede llegar a ser, así que le enseña a leer, escribir, pensar de forma creativa... cosas no muy normales para una niña en esa época. Sophie siempre ha soñado con su madre, teniendo un gran trauma con el naufragio, diciendo que su madre está viva, aunque sólo le queda de ella un estuche de violonchelo con el que fue rescatada. Cuando planean ir a París en busca de respuestas, aparece una señora agridulce y borde, que dice ser de la Agencia de Protección de Menores. Al analizar la casa y en el ambiente que se encuentra Sophie, se escandaliza de que no lleve ropa adecuada (utiliza pantalones), escala árboles y por ello tiene rasguños por el cuerpo, la casa está patas arriba, sin orden ni comida suficiente para ambos. Amenaza a Charles con quitarle a Sophie, ya que no está bien visto que un hombre cuide de una niña. Planean una segunda visita en unos días y ambos se esmeran en recoger la casa, Charles le compra ropa adecuada para una niña de su edad, enseñándole frases típicas para que la cuidadora no se extrañe y se la lleve. Todos los intentos por aparentar una vida cotidiana y normal sale mal, muy mal. Llega una carta judicial en la que Sophie tendrá que ir a un orfanato y dejar a Charles, puesto que no está en condiciones de cuidar de ella. Pero Charles tiene otro plan: se fugarán a París.
Realmente no sé muy bien cómo valorar este libro, tiene un vocabulario infantil adecuado para los niños, pero realmente la trama esconde a mi parecer temas realmente complejos: desigualdad de géneros, niños infravalorados, orfandad... Más de la mitad del libro se centra en los tejabundos, que son niños que se han escapado de los orfanatos debido a su maltrato, prefieren vivir como pueden en los cielos de París. Niños sin infancia, sin sonrisa, con una única norma: nunca bajan a la calle, puesto que no quieren volver a otro orfanato.
Por otro lado, Sophie es una niña que afirma una y otra vez que su madre está viva. A pesar que los titulares de los periódicos digan que no hubo supervivientes, a pesar que la policía les echen por falta de pruebas, y a pesar de que todo el mundo dice que no puede ser que recuerde a su madre puesto que era un bebé. Solamente Charles le cree y eso basta para que ella no se rinda.
Es bonito, sin duda, la confianza ciega que Charles tiene en Sophie. A veces los adultos no nos damos cuenta de lo que podemos influir en un niño, y Charles hizo que Sophie se creyera capaz de todo lo que se propusiese. Le escuchaba, le ayudaba y le animaba. De verdad, es vital para que un niño crezca con ambiciones y sueños en la vida. Ésa era la diferencia entre Sophie y los tejabundos.
La trama es compleja, pero se resuelve en unas 200 y poco páginas que se leen muy rápido; me ha faltado partes más extensas (sobre todo el desenlace) y otras se me hicieron un poco cuesta arriba y densas. Aún así creo que es un buen libro con unos valores perceptibles de valor, amistad y convicción ante tus ideas.
¡Gracias por el ejemplar!
¿Lo habéis leído? ¿Qué estáis leyendo? ¿Qué lecturas de terror habéis leído este año?
Pasad un genial fin de semana ♥